Martinica viaje cosas de españoles 1805
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Al mando absoluto de la combinada estaba el vicealmirante francés Villeneuve, pero al hacerse a la mar en abril no quiso esperar a los buques más retrasados, por lo que pronto se le perdieron de vista a don [[Vazquez_Mondragon_y_de_Pedraza,_Francisco_Biografia|'''Francisco Vázquez Mondragon''']], quien con su navío el [[Terrible_(1754)|'''''Terrible''''']] quedó separado junto a los [[Firme|'''''Firme''''']] y [[España_(1757)|'''''España''''']], más la fragata [[Magdalena,_Santa_Maria_(1773)|'''''Magdalena''''']]; por ser el más antiguo de los comandantes, al quedase sin superiores, abrió el pliego de instrucciones reservado, por ello supo que el punto de reunión era Fuerte Real en la isla de la Martinica, por ello puso rumbo al lugar, consiguiendo llegar antes que el grueso de la escuadra, y esto lo consiguió a pesar del poco andar del navío [[España_(1757)|'''''España''''']], y un combate en el que se encontró con dos corsarios británicos de gran fuerza, a los que después de duro combate apresó, siendo marinados al punto de encuentro. | Al mando absoluto de la combinada estaba el vicealmirante francés Villeneuve, pero al hacerse a la mar en abril no quiso esperar a los buques más retrasados, por lo que pronto se le perdieron de vista a don [[Vazquez_Mondragon_y_de_Pedraza,_Francisco_Biografia|'''Francisco Vázquez Mondragon''']], quien con su navío el [[Terrible_(1754)|'''''Terrible''''']] quedó separado junto a los [[Firme|'''''Firme''''']] y [[España_(1757)|'''''España''''']], más la fragata [[Magdalena,_Santa_Maria_(1773)|'''''Magdalena''''']]; por ser el más antiguo de los comandantes, al quedase sin superiores, abrió el pliego de instrucciones reservado, por ello supo que el punto de reunión era Fuerte Real en la isla de la Martinica, por ello puso rumbo al lugar, consiguiendo llegar antes que el grueso de la escuadra, y esto lo consiguió a pesar del poco andar del navío [[España_(1757)|'''''España''''']], y un combate en el que se encontró con dos corsarios británicos de gran fuerza, a los que después de duro combate apresó, siendo marinados al punto de encuentro. | ||
| - | + | Esto fue una demostración palpable de lo que más tarde ocurriría en el cabo de Trafalgar, en conclusión, el vicealmirante francés no estaba a la altura de las circunstancias, quedando demostrado que, con buques más lentos llegaron antes que él con más rápidos. Es algo que llama la atención y sobre todo, el no quedarse a esperar a esos más lentos abandonándolos a sus medios, la pericia del capitán de navío español dejó en evidencia las carencias del mando francés. | |
| - | Esto fue una demostración palpable de lo que más tarde ocurriría en el cabo de Trafalgar, en conclusión, el vicealmirante francés no estaba a la altura de las circunstancias, quedando demostrado que, con buques más lentos llegaron antes que él con más rápidos. Es algo que llama la atención y sobre todo, el no quedarse a esperar a esos más lentos abandonándolos a sus medios | + | |
Por esta demostración de ser un buen marino, su general don [[Gravina_y_Napoli,_Federico_Biografia|'''Federico Gravina''']] le dirige un escrito en el que dice: {{Cita|'''''«Todo lo practicado por V.S. para reunir los buques separados de mi insignia por la precipitación de nuestra salida, hasta la llegada á este puerto, es una nueva prueba del acreditado celo, inteligencia y acierto con que en todas ocasiones ha desempeñado V. S. las comisiones que la piedad del Rey ha puesto á su cuidado; y el partido tomado con los corsarios ingleses apresados, nada me deja que desear; yo tengo la más particular y sincera complacencia en manifestárselo á V. S. para su satisfaccion, y en respuesta á su oficio de ayer detallándome todo lo ocurrido, y en la primera ocasion que se presente daré cuenta oficial á la superioridad para hacer á V. S. la justicia á que se ha hecho acreedor. Dios guarde á V. S. muchos años. Navío Argonauta, en la Martinica, 14 de mayo de 1805. — Federico Gravina. — Sr. D. Francisco Vazquez Mondragon.»'''''}} | Por esta demostración de ser un buen marino, su general don [[Gravina_y_Napoli,_Federico_Biografia|'''Federico Gravina''']] le dirige un escrito en el que dice: {{Cita|'''''«Todo lo practicado por V.S. para reunir los buques separados de mi insignia por la precipitación de nuestra salida, hasta la llegada á este puerto, es una nueva prueba del acreditado celo, inteligencia y acierto con que en todas ocasiones ha desempeñado V. S. las comisiones que la piedad del Rey ha puesto á su cuidado; y el partido tomado con los corsarios ingleses apresados, nada me deja que desear; yo tengo la más particular y sincera complacencia en manifestárselo á V. S. para su satisfaccion, y en respuesta á su oficio de ayer detallándome todo lo ocurrido, y en la primera ocasion que se presente daré cuenta oficial á la superioridad para hacer á V. S. la justicia á que se ha hecho acreedor. Dios guarde á V. S. muchos años. Navío Argonauta, en la Martinica, 14 de mayo de 1805. — Federico Gravina. — Sr. D. Francisco Vazquez Mondragon.»'''''}} | ||
Revisión de 10:55 17 mar 2018
1805 Cosas de españoles. Viaje a la Martinica
Al mando absoluto de la combinada estaba el vicealmirante francés Villeneuve, pero al hacerse a la mar en abril no quiso esperar a los buques más retrasados, por lo que pronto se le perdieron de vista a don Francisco Vázquez Mondragon, quien con su navío el Terrible quedó separado junto a los Firme y España, más la fragata Magdalena; por ser el más antiguo de los comandantes, al quedase sin superiores, abrió el pliego de instrucciones reservado, por ello supo que el punto de reunión era Fuerte Real en la isla de la Martinica, por ello puso rumbo al lugar, consiguiendo llegar antes que el grueso de la escuadra, y esto lo consiguió a pesar del poco andar del navío España, y un combate en el que se encontró con dos corsarios británicos de gran fuerza, a los que después de duro combate apresó, siendo marinados al punto de encuentro.
Esto fue una demostración palpable de lo que más tarde ocurriría en el cabo de Trafalgar, en conclusión, el vicealmirante francés no estaba a la altura de las circunstancias, quedando demostrado que, con buques más lentos llegaron antes que él con más rápidos. Es algo que llama la atención y sobre todo, el no quedarse a esperar a esos más lentos abandonándolos a sus medios, la pericia del capitán de navío español dejó en evidencia las carencias del mando francés.
Por esta demostración de ser un buen marino, su general don Federico Gravina le dirige un escrito en el que dice:
Bibliografía:
Fernández Duro, Cesáreo.: La Armada Española desde la unión de los reinos de Castilla y Aragón. Est. Tipográfico «Sucesores de Rivadeneyra» 9 tomos. Madrid, 1895-1903.
Paula Pavía, Francisco de.: Galería Biográfica de los Generales de Marina. Imprenta J. López. Madrid, 1873.
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