Carreno, Francisco Biografia
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- | Vino al mundo en Triana arrabal entonces de la ciudad de Sevilla por el año de 1528, siendo su padre don Bartolomé Carreño. | + | |
+ | Vino al mundo en Triana arrabal entonces de la ciudad de Sevilla por el año de 1528, siendo su padre don [[Carreno,_Bartolome_Biografia|'''Bartolomé Carreño''']]. | ||
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Muy pronto comenzó a navegar con su padre, tan joven que no debía tener más de siete u ocho años cuando ya le acompañó en una de las travesías del océano con rumbo a Tierra Firme. | Muy pronto comenzó a navegar con su padre, tan joven que no debía tener más de siete u ocho años cuando ya le acompañó en una de las travesías del océano con rumbo a Tierra Firme. | ||
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Siguiendo a su padre participó en todas las expediciones y con las que sistemáticamente fueron atacando a las diferentes islas, que eran las de Dominica, Martinica, Santa Lucía, Granada y Trinidad, al concluir las expediciones con las que se había conseguido hacer huir a los nativos quedó asegurada la isla de Puerto Rico. | Siguiendo a su padre participó en todas las expediciones y con las que sistemáticamente fueron atacando a las diferentes islas, que eran las de Dominica, Martinica, Santa Lucía, Granada y Trinidad, al concluir las expediciones con las que se había conseguido hacer huir a los nativos quedó asegurada la isla de Puerto Rico. | ||
- | Tampoco perdió ocasión solo en combatir, sino que descubrió que en aquellas islas eran fáciles de encontrar perlas, de las que no se habían visto nunca, ya que su forma era parecida a la de una pera '''<ref>En uno de sus viajes de regreso a la Península, escogió la mejor de ellas y se le envío como regalo | + | Tampoco perdió ocasión solo en combatir, sino que descubrió que en aquellas islas eran fáciles de encontrar perlas, de las que no se habían visto nunca, ya que su forma era parecida a la de una pera '''<ref>En uno de sus viajes de regreso a la Península, escogió la mejor de ellas y se le envío como regalo a don Carlos I, quien se la regalo a su esposa doña Isabel de Portugal, quien siempre la lucio, pasando con el tiempo a ser la famosa '''‹Peregrina›''' que fue robada cuando la invasión Napoleónica y posteriormente apareció muchos años después, al comprarla el actor de cine Richard Burton, quien se la regalo a su vez a su esposa la también actriz Liz Taylor, que es la actual poseedora de ella (recientemente fallecida). El nombre se lo puso el mismo Rey, ya que para entregársela, dio la casualidad que el emisario-portador tuvo que visitar varias ciudades de España, pero cuando llegaba el Rey ya había salido de ella, por lo que al final se la entregó estando en tierras del Sacro Imperio Romano Germánico; por el motivo de haber recorrido el océano, la península y parte de Europa, le puso el nombre por el que se la conoce.</ref>''' y con un excelente oriente, así que entre combate y combate se iban haciendo reconocimientos y recuperando sobre todo en el cabo de la Vela tan valiosas joyas, que a parte de ayudar al mantenimiento de las expediciones servían de descanso a las tripulaciones, ya que alguna se perdía por el rumbo. |
Dejó la navegación con su padre y por más de veinticinco años estuvo navegando por los mares del Sur, así como viajes a la Península con caudales, retornando a Tierra Firme y prosiguiendo con ellas por todo el seno mejicano y las Antillas. | Dejó la navegación con su padre y por más de veinticinco años estuvo navegando por los mares del Sur, así como viajes a la Península con caudales, retornando a Tierra Firme y prosiguiendo con ellas por todo el seno mejicano y las Antillas. | ||
- | Pasó posteriormente a istmo de Panamá en el virreinato de Nueva Granada, defendiendo la población de Nombre de Dios cuando los franceses atacaron Cartagena de Indias y ya puestos, atacaron la ciudad donde se encontraba don Francisco, pero formó bien las defensas consiguiendo vencer y por ello hacerles huir de aquellas aguas. | + | Pasó posteriormente a istmo de Panamá en el virreinato de Nueva Granada, defendiendo la población de Nombre de Dios cuando los franceses atacaron Cartagena de Indias y ya puestos, atacaron la ciudad donde se encontraba don '''Francisco''', pero formó bien las defensas consiguiendo vencer y por ello hacerles huir de aquellas aguas. |
Fue uno de los capitanes, que por orden de don Felipe II se pusieron en marcha para acabar con el levantamiento de Lope de Aguirre y sus cimarrones, consiguiendo al final alcanzarle pero ya había sido muerto por los mismos indígenas. | Fue uno de los capitanes, que por orden de don Felipe II se pusieron en marcha para acabar con el levantamiento de Lope de Aguirre y sus cimarrones, consiguiendo al final alcanzarle pero ya había sido muerto por los mismos indígenas. | ||
- | Por una Real cédula de fecha del 8 de junio de 1573, se le nombra almirante de la escuadra de don Pedro Menéndez de Avilés, con la que permaneció un tiempo aprovisionando sobre todo de víveres a los colonos de la Florida. | + | Por una Real cédula de fecha del 8 de junio de 1573, se le nombra almirante de la escuadra de don [[Menendez_de_Aviles_y_Marquez,_Pedro_Biografia|'''Pedro Menéndez de Avilés''']], con la que permaneció un tiempo aprovisionando sobre todo de víveres a los colonos de la Florida. |
Dejó el mando de la escuadra, por recibir una Real cédula con fecha del 13 de febrero de 1577, por la que el rey don Felipe II le nombraba Gobernador de la isla de Cuba. | Dejó el mando de la escuadra, por recibir una Real cédula con fecha del 13 de febrero de 1577, por la que el rey don Felipe II le nombraba Gobernador de la isla de Cuba. | ||
- | Las intrigas de la época de algunos sectores o grupos, que ya se venían manifestando cuando don Pedro Menéndez de Avilés tuvo sus problemas con el anterior Gobernador de la isla, que no fueron pocos los inconvenientes que le planteó, hasta conseguir establecerse de verdad en la Florida y como don Francisco Carreño había intervenido en alguno de los conflictos, debían de estar esperando la ocasión para quitarlo del medio. | + | Las intrigas de la época de algunos sectores o grupos, que ya se venían manifestando cuando don '''Pedro Menéndez de Avilés''' tuvo sus problemas con el anterior Gobernador de la isla, que no fueron pocos los inconvenientes que le planteó, hasta conseguir establecerse de verdad en la Florida y como don '''Francisco Carreño''' había intervenido en alguno de los conflictos, debían de estar esperando la ocasión para quitarlo del medio. |
Al parecer él de alguna forma lo sabía, pues fue curioso que se encuentre un documento con fecha del 25 de febrero de 1579, en el que firma su testamento en favor de su esposa doña Catalina de Rivera y ya nada más se sabe de él, solo que falleció en el mismo año por envenenamiento. | Al parecer él de alguna forma lo sabía, pues fue curioso que se encuentre un documento con fecha del 25 de febrero de 1579, en el que firma su testamento en favor de su esposa doña Catalina de Rivera y ya nada más se sabe de él, solo que falleció en el mismo año por envenenamiento. |
Última versión de 10:11 6 sep 2022
Francisco Carreño Biografía
Navegante, Almirante y Gobernador de la isla de Cuba.
Contenido |
Orígenes
Vino al mundo en Triana arrabal entonces de la ciudad de Sevilla por el año de 1528, siendo su padre don Bartolomé Carreño.
Hoja de Servicios
Muy pronto comenzó a navegar con su padre, tan joven que no debía tener más de siete u ocho años cuando ya le acompañó en una de las travesías del océano con rumbo a Tierra Firme.
Continuó navegando a las órdenes de su padre, encontrándose en la isla de Santo Domingo le llegaron noticias de los continuos ataques que sufría la isla de Puerto Rico, por parte de los indígenas de la tribu de los Caribe [1] de las islas cercanas, que por su práctica del canibalismo realizaban ataques nocturnos con sus piraguas y capturaban a algún español, de los que nunca más se supo.
Siguiendo a su padre participó en todas las expediciones y con las que sistemáticamente fueron atacando a las diferentes islas, que eran las de Dominica, Martinica, Santa Lucía, Granada y Trinidad, al concluir las expediciones con las que se había conseguido hacer huir a los nativos quedó asegurada la isla de Puerto Rico.
Tampoco perdió ocasión solo en combatir, sino que descubrió que en aquellas islas eran fáciles de encontrar perlas, de las que no se habían visto nunca, ya que su forma era parecida a la de una pera [2] y con un excelente oriente, así que entre combate y combate se iban haciendo reconocimientos y recuperando sobre todo en el cabo de la Vela tan valiosas joyas, que a parte de ayudar al mantenimiento de las expediciones servían de descanso a las tripulaciones, ya que alguna se perdía por el rumbo.
Dejó la navegación con su padre y por más de veinticinco años estuvo navegando por los mares del Sur, así como viajes a la Península con caudales, retornando a Tierra Firme y prosiguiendo con ellas por todo el seno mejicano y las Antillas.
Pasó posteriormente a istmo de Panamá en el virreinato de Nueva Granada, defendiendo la población de Nombre de Dios cuando los franceses atacaron Cartagena de Indias y ya puestos, atacaron la ciudad donde se encontraba don Francisco, pero formó bien las defensas consiguiendo vencer y por ello hacerles huir de aquellas aguas.
Fue uno de los capitanes, que por orden de don Felipe II se pusieron en marcha para acabar con el levantamiento de Lope de Aguirre y sus cimarrones, consiguiendo al final alcanzarle pero ya había sido muerto por los mismos indígenas.
Por una Real cédula de fecha del 8 de junio de 1573, se le nombra almirante de la escuadra de don Pedro Menéndez de Avilés, con la que permaneció un tiempo aprovisionando sobre todo de víveres a los colonos de la Florida.
Dejó el mando de la escuadra, por recibir una Real cédula con fecha del 13 de febrero de 1577, por la que el rey don Felipe II le nombraba Gobernador de la isla de Cuba.
Las intrigas de la época de algunos sectores o grupos, que ya se venían manifestando cuando don Pedro Menéndez de Avilés tuvo sus problemas con el anterior Gobernador de la isla, que no fueron pocos los inconvenientes que le planteó, hasta conseguir establecerse de verdad en la Florida y como don Francisco Carreño había intervenido en alguno de los conflictos, debían de estar esperando la ocasión para quitarlo del medio.
Al parecer él de alguna forma lo sabía, pues fue curioso que se encuentre un documento con fecha del 25 de febrero de 1579, en el que firma su testamento en favor de su esposa doña Catalina de Rivera y ya nada más se sabe de él, solo que falleció en el mismo año por envenenamiento.
Dejó escrito: «Memorial, que dió al rey sobre el exámen y ejercicio de artilleros de la navegacion de Indias y visita de las naos de la misma carrera» El original se encuentra en el Archivo de Indias de la ciudad de Sevilla, Legajo de Papeles diversos, pero no tiene fecha. Existiendo una copia en el Deposito Hidrográfico.
Notas
- ↑ Por este motivo posteriormente se ha conocido a esta zona como el Caribe, en recuerdo de los indígenas que en un principio habitaban éste mar. (Para que luego se escriba lo que se escribe de la colonización de los españoles de aquellas tierras)
- ↑ En uno de sus viajes de regreso a la Península, escogió la mejor de ellas y se le envío como regalo a don Carlos I, quien se la regalo a su esposa doña Isabel de Portugal, quien siempre la lucio, pasando con el tiempo a ser la famosa ‹Peregrina› que fue robada cuando la invasión Napoleónica y posteriormente apareció muchos años después, al comprarla el actor de cine Richard Burton, quien se la regalo a su vez a su esposa la también actriz Liz Taylor, que es la actual poseedora de ella (recientemente fallecida). El nombre se lo puso el mismo Rey, ya que para entregársela, dio la casualidad que el emisario-portador tuvo que visitar varias ciudades de España, pero cuando llegaba el Rey ya había salido de ella, por lo que al final se la entregó estando en tierras del Sacro Imperio Romano Germánico; por el motivo de haber recorrido el océano, la península y parte de Europa, le puso el nombre por el que se la conoce.
Bibliografía:
Aguilar y de Córdova. Diego de.: El Marañón. Transcripción del códice de 1596 e impreso. Atlas. Madrid 1990. El códice se conserva en la Biblioteca de la Universidad de Oviedo.
Enciclopedia General del Mar. Garriga. 1968. Compilada por el contralmirante don Carlos Martínez-Valverde y Martínez.
Fernández de Navarrete, Martín.: Biblioteca Marítima Española. Obra póstuma. Madrid. Imprenta de la Viuda de Calero. 1851.
González-Doria, Fernando.: Las Reinas de España. Editorial Cometa. Madrid, 1981.
Ortíz de Zúñiga, Diego.: Anales Eclesiásticos y Seculares de la Muy Noble y Muy Leal ciudad de Sevilla. Guadalquivir S.L. 1988. Edición Facsímil de la Imprenta Real, Madrid 1795.
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