Gravina (1936)
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Construcción:
Siendo ministro de Marina el almirante García de los Reyes se aprobó en 1929 la construcción de otros siete destructores de la clase Churruca, que sería la segunda serie. La formarían los destructores Almirante Antequera, Almirante Miranda, Gravina, Escaño, Jorge Juan, Ulloa y Ciscar.
Se colocó su quilla en Cartagena en el astillero de la SECN el 1º de junio de 1931. Fue botado el 24 de diciembre de 1931. Entró en servicio en la Armada española el 24 de agosto de 1936.
Para ser identificado, llevaba pintado en la proa y por ambas bandas la inicial “G”, las cuales desaparecieron en la guerra civil. Después de la guerra se volvió a pintar la inicial en cada banda, pero más retrasada, a la altura del puente. A partir de 1952 se sustituyeron las letras por números.
Las características eran prácticamente las mismas que los de la primera serie, aunque variaron ligeramente. Tenía un desplazamiento de 1.650 toneladas con carga normal y 1.914 toneladas a plena carga. Medían 101,5 metros de eslora, 9,7 metros de manga, 6,02 de puntal y 3,2 de calado medio. Su tripulación era de 160 hombres.
Tenían una proa recta, una popa redondeada, cubierta del castillo hasta un tercio de la eslora, dos chimeneas ligeramente inclinadas hacia popa, un mástil de señales entre el puente de mando y la chimenea de proa, otro mástil más pequeño a popa.
La planta propulsora estaba formada por cuatro calderas tipo Yarrow, conectadas a dos grupos de turbinas Parsons, alcanzando una potencia de 42.000 caballos que accionaban dos ejes y dos hélices. Alcanzó en pruebas los 36 nudos de velocidad, aunque en operaciones podía alcanzar una velocidad respetable de 34 nudos. Con 540 toneladas de combustible, tenían una autonomía de 4.500 millas a 14 nudos.
Armado con 4 cañones Vickers de 120 mm, dos cañones de 76 mm, 4 ametralladoras antiaéreas, seis tubos lanzatorpedos de 533 mm en dos montajes triples, dos morteros lanzacargas de profundidad.
Historial:
Cuando comenzó la guerra civil en julio de 1936, se encontraba en periodo de alistamiento. Fue alistado apresuradamente. Se le instalaron cañones de 101 mm, procedentes del primer acorazado España. Al entrar en servicio, a finales del mes de agosto, es destinado a patrullar, desde la base de Málaga, las aguas del estrecho junto al destructor Almirante Miranda. Estaba al mando del alférez de navío don Alberto Caso Montaner.
Mientras el grueso de la escuadra republicana se había desplazado al Cantábrico, los destructores Almirante Ferrándiz, Sánchez Barcáiztegui, Gravina, Churruca y Alcalá Galiano, y los submarinos B-5 y C-2 realizaban patrullas en el estrecho y Mediterráneo.
Aprovechando ese despliegue de la flota republicana en el Cantábrico, los nacionales enviaron a finales de septiembre al estrecho a los cruceros Canarias y Cervera, donde operaron con impunidad. Los dos cruceros se encontraron la madrugada del 29 de septiembre en el estrecho con los destructores Almirante Ferrándiz y Gravina. El Gravina fue descubierto a la altura de Tánger y fue alcanzado por los cañones del crucero. El alférez Caso izó bandera blanca, que fue arriada por el comité del destructor. Ganaron velocidad al encender la cuarta caldera y se alejaron del crucero, lanzando cortinas de humo para ocultarse. Consiguió entrar en Casablanca, perseguido por el Cervera. No tuvo la misma suerte el Ferrándiz, que intentó alejarse hacia el Mediterráneo y sería hundido.
Para regresar al Mediterráneo aprovechó la llegada del grueso de la escuadra republicana. El Gravina debía salir con el petrolero Campeador y el mercante Cabo Prior para unirse a la escuadra el 17 de octubre a unas 140 millas del cabo Espartel. Finalmente, los tres buques no salieron de Casablanca. Salió el 8 de noviembre al mando del capitán de corbeta don Luis González Ubieta rumbo al cabo de San Vicente, llegando al Mediterráneo.
Salió de Cartagena el 14 de noviembre para realizar una misión de bombardeo de Ibiza con la flotilla de destructores. El 8 de diciembre, al mando del alférez de navío don José Luis Barbastro, salió de Cartagena con el crucero Méndez Núñez y el destructor Sánchez Barcáiztegui para ser destinado a Barcelona, desde donde realizó varias salidas para la protección del tráfico. Llegaron a Barcelona el día 9 con el petrolero Campillo. Los tres buques atacaron Soller el 20 de diciembre y regresaron a Barcelona.
De nuevo en Cartagena, salió el 19 de diciembre con dos destructores rumbo a Mahón. El 20 de enero de 1937 zarpa con varios destructores de la 2ª flotilla para bombardear la costa de Estepona, regresando a Cartagena el día 22. Vuelve a salir a la mar el 5 de febrero con los cruceros y la 2ª flotilla para bombardear la costa andaluza, regresando al día siguiente sin haber realizado ninguna operación.
A primeros de marzo de 1937 patrulló la costa de Levante con el destructor Churruca. El 21 de marzo, después de una operación de escolta, se unió al destructor Sánchez Barcáiztegui para dirigirse a Mallorca y bombardear el puerto de Soller. Los dos destructores regresaron a Cartagena al día siguiente desde Barcelona. Estaba escoltando al acorazado Jaime I con el destructor Almirante Miranda, cuando el acorazado quedó varado cerca de Almería el 25 de abril. El 29 de junio es destinado a Valencia junto al destructor Almirante Antequera, regresando a Cartagena en el mes de julio.
El 12 de julio de 1937 intervino en el combate de Cullera, cuando el crucero Baleares intercambió disparos sin consecuencias con la escuadra republicana, que daba escolta al petrolero Campillo a Valencia. Eran los destructores Sánchez Barcáiztegui, Lepanto, Churruca, Almirante Miranda, Almirante Valdés y Gravina.
El 6 de septiembre de 1937 salió de Cartagena con los cruceros Libertad y Méndez Núñez y los destructores Almirante Miranda, Almirante Valdés, Lepanto, Gravina, Jorge Juan y Escaño. Debían dirigirse a la costa argelina para proteger a tres mercantes que se dirigían a la URSS. Durante esta salida tuvo lugar el encuentro de Cherchel. Mientras se dirigían a Cartagena, fueron avistados por el crucero Baleares. Los destructores y mercantes pusieron rumbo sur, hacia el puerto argelino de Cherchell, mientras los dos cruceros republicanos se enfrentaron al Baleares.
El 17 de septiembre de 1937 salió de Barcelona escoltando a los mercantes Jaime II y J. J. Sister con los destructores Sánchez Barcáiztegui, Almirante Antequera y Escaño. Se enfrentaron al crucero Canarias. El destructor Antequera le atacó con dos torpedos, que fallaron. El crucero Canarias logró un impacto en el Sánchez Barcáiztegui. Aprovechando su mayor velocidad, los destructores pudieron escapar, dejando sin escolta a los mercantes, que fueron capturados.
El 5 de marzo de 1938 salieron de Cartagena los cruceros Libertad y Méndez Núñez y los destructores Sánchez Barcáiztegui, Antequera, Gravina, Lepanto y Lazaga para atacar Palma de Mallorca. La operación fue suspendida para atacar al crucero Cervera que los republicanos creían que se dirigía a Cádiz. El mismo día salieron de Palma los cruceros Canarias, Baleares y Cervera para dar protección lejana a los mercantes italianos Aizkori-Mendi y Unbe-Mendi, procedentes de Italia. La noche del 5 al 6 de marzo navegaban las dos escuadras en total oscuridad cerca del cabo de Palos. El Sánchez Barcáiztegui lanzó dos torpedos a medianoche contra el Cervera que no alcanzaron al crucero, perdiéndose el contacto entre las dos formaciones. A las dos de la mañana se produjo un nuevo avistamiento. El Baleares disparó con proyectiles iluminantes, descubriendo su posición, respondiendo al fueron los cruceros republicanos, mientras los destructores lanzaron torpedos, cuatro el Sánchez Barcáiztegui, cinco el Antequera y tres el Lepanto. El crucero Baleares, fue alcanzado por la artillería del Libertad y por torpedos, seguramente los del Lepanto, que impactaron en los pañoles de las torres de proa y provocaron una explosión y se hundió. La escuadra republicana, en vez de explotar su éxito, regresó a Cartagena. Hasta el final de la guerra no participó en ninguna operación de importancia.
El 12 de julio de 1939 salieron de Ferrol el crucero Almirante Cervera y los destructores Gravina y Jorge Juan rumbo a Santander y San Sebastián. Del Cantábrico pasaron a visitar otros puertos, saliendo de La Coruña el 19 de julio el crucero y los dos destructores al día siguiente rumbo a Cádiz y al Mediterráneo. En el mes de septiembre se encontraba de nuevo en aguas gallegas durante la visita a varios puertos del general Franco.
El 1º de mayo de 1940 llegó una escuadra española a Santa Cruz de Tenerife, integrada por los cruceros Canarias, Almirante Cervera, Navarra y destructores Ulloa, Gravina y Ciscar.
El 11 de septiembre de 1941 salió de Santander el crucero Almirante Cervera con el general Franco a bordo, llegando el mismo día a Bilbao. Iba escoltado por los destructores Almirante Antequera, Alcalá Galiano, Gravina y Jorge Juan.
En 1944 y 1945 se encontraba al mando del capitán de fragata don Adolfo Baturone Colombo. En 1946 estaba al mando del capitán de fragata don Antonio Torres.
A finales de marzo de 1947 se encontraban en Barcelona los destructores Gravina, Ulloa y Lepanto, de la 2ª flotilla de destructores. Estaban al mando del capitán don Luis Lallemand, con insignia en el Gravina. A finales de abril de 1947 estaba al mando del capitán de fragata don Miguel Ángel Liaño.
El 10 de mayo de 1947 llegó a Valencia la 2ª flotilla de destructores con motivo de la visita a la ciudad del general Franco. Estaba compuesta por los destructores Gravina, Ulloa, Churruca y Lepanto. A mediados de mayo de 1947 visitó Franco Palma de Mallorca. Llegó el 16 de mayo a bordo del crucero Miguel de Cervantes, acompañado por los cruceros Galicia y Almirante Cervera, y los destructores Ulloa, Gravina, Lepanto, Churruca, Jorge Juan y Ciscar, Sánchez Barcáiztegui, Almirante Valdés. La misma escuadra llegó a Barcelona el 18 de mayo con Franco en visita a la ciudad. A última hora de la tarde del 20 de mayo de 1947 salió de Barcelona el crucero Galicia con el ministro de marina a bordo, el almirante don Francisco Regalado. Escoltado por la segunda flotilla de destructores, puso rumbo a Mahón, donde el ministro realizó una visita de inspección a la base naval. Regresó a Barcelona la noche del 22 de mayo con el crucero Galicia y los destructores Churruca y Gravina.
La división naval del Mediterráneo llegó a Castellón el 16 de marzo de 1949. Está compuesta por el crucero Méndez Núñez y los destructores Ulloa, Gravina, Escaño y Alcalá Galiano. La misma división, al mando del contraalmirante Fernández Martín, llegó a Valencia al día siguiente. Para finales de mayo estaban de regreso en Cartagena.
En octubre de 1949 realizó Franco una visita oficial a Portugal. Fueron los cruceros Canarias, Galicia, Cervantes y Cervera, acompañados por los destructores Sánchez Barcáiztegui, José Luis Díez, Almirante Valdés, Almirante Antequera, Ciscar y Jorge Juan, que salieron de Vigo y llegaron a Lisboa el 25 de octubre de 1949.
El 7 de noviembre de 1949 fondeó en Palma de Mallorca la escuadra del Mediterráneo al mando del vicealmirante don Pedro Fernández Martín, con el crucero Méndez Núñez y los destructores Alcalá Galiano, Churruca, Gravina y Lepanto, mandando la escuadrilla el capitán de navío don Pedro Sans. Fondearon en Barcelona a mediados de noviembre.
Entre el 15 y el 19 de octubre de 1950 se realizaron unas maniobras en el Atlántico. La escuadra de 45 buques, al mando del almirante don Alfonso Arriaga Adam se dividió en dos bandos, uno simuló llevar un convoy de Cádiz a las islas Canarias, mientras que otro bando trató de interceptarlo y destruirlo. En el segundo bando o “rojo” se encontraba el destructor Gravina. El almirante Arriaga se encontraba embarcado en el crucero Canarias, que actuó con árbitro. El 6 de noviembre de 1950 zarparon para sus respectivas bases los buques de la escuadra.
La división naval del Mediterráneo, mandada por el contraalmirante don José Cervera Tribout, llegó a Almería el 8 de noviembre de 1950. La forman el crucero Méndez Núñez y los destructores Escaño, Gravina, Lepanto y Almirante Miranda.
El 7 de marzo de 1951 salió de Cartagena para realizar maniobras la división del Mediterráneo, mandada por el contraalmirante Cervera Tribout, con el crucero Méndez Núñez y los destructores Escaño, Gravina y Liniers. La división recaló en Barcelona a mediados de marzo. Salió de Barcelona el 21 de marzo, acompañados los cuatro buques por el dragaminas Ter. Entraron en Cartagena el 23 de marzo.
A las siete de la tarde del 14 de junio de 1951 recaló en Barcelona la división naval del Mediterráneo, mandada por el contraalmirante don José Cervera y compuesta por el crucero Méndez Núñez y la flotilla de destructores, mandada por el capitán de navío don Federico López Ruiz, con los destructores Escaño, Liniers, Gravina, capitán de fragata don Juan García, y Almirante Miranda. Realizaron un crucero de instrucción por las costas de Baleares, Levante y Cataluña. Anteriormente visitaron los puertos de Palma de Mallorca, Alcudia y Rosas. El 18 de junio se hacen a la mar para recalar en Tarragona, Valencia, Alicante y finalmente Cartagena.
Al mando del contraalmirante don José Cervera Tribout, el 6 de octubre de 1951 salió de Cartagena la división del Mediterráneo rumbo a Cádiz. Estaba compuesta por el crucero Méndez Núñez y los destructores Escaño, Liniers y Gravina. Asistieron a las fiestas de la coronación de la Virgen del Carmen. Procedente de Cádiz llegó el destructor a Ferrol el 18 de octubre de 1951 con el ministro de Marina portugués a bordo, siendo recibido por el ministro español don Salvador Moreno Fernández. La división recaló en Málaga el 29 de marzo y regresó después a Cartagena.
El 24 de mayo de 1952 salieron de Cartagena los buques de la 2ª división mandada por el contraalmirante don José Cervera Tribout, el crucero Cervantes y los destructores Gravina, Liniers y Álava. A bordo del crucero embarcó el general Franco y su esposa y salió escoltado por los destructores de la 2ª división de la Flota, más el cañonero Magallanes, llegando a Barcelona el 29 de mayo.
El 16 de septiembre de 1952 salieron de Cartagena los buques de la 2ª división, mandada por el contraalmirante don José Cervera y compuesta por el crucero Cervantes, los destructores Gravina, Liniers, Álava y Escaño, el cañonero Magallanes, el minador Tritón, el dragaminas Nervión y los submarinos D-1, D-2 y G-7, para realizar varios ejercicios. La división recaló en Alicante y salió de puerto el 23 de septiembre para continuar las maniobras.
A las once de la mañana del 25 de octubre de 1952 entraron en Ceuta los destructores de la 2ª flotilla Liniers, Escaño y Gravina, mandados por el capitán de navío don Federico López, con insignia en el primero. Una hora después comenzó a entrar el crucero Méndez Núñez, insignia del contraalmirante don José Cervera Tribout. Fueron recibidos por el cañonero Sarmiento de Gamboa, de las fuerzas navales del norte de África. La división salió de puerto la madrugada del 29 de octubre. A última hora de la tarde del mismo día llegaron a Málaga.
Procedente de Valencia entró en Ibiza el 12 de marzo de 1953 la 2ª división, que manda el contraalmirante don Pedro Nieto Antúnez, formada por el crucero Miguel de Cervantes, los destructores Liniers, Gravina, Almirante Miranda y Escaño, cuatro fragatas y el dragaminas Nervión. Después de haber realizado maniobras en el Mediterráneo, regresó la división a Cartagena el 13 de mayo.
El 2 de octubre de 1953 llegaron a Ferrol procedentes de Cartagena los destructores Gravina, Liniers, Álava, Escaño y Almirante Miranda. En la base de Ferrol se unieron a los buques de la 1ª división de la Flota y salieron rumbo a Cádiz para iniciar unas maniobras. Al finalizar las maniobras, la escuadra realizó un desfile zarpando de Cádiz la tarde del 14 de octubre de 1953 rumbo al cabo de San Vicente. En el buque insignia de la escuadra, el crucero Canarias, embarcaron el jefe del Estado, el general Franco, el jefe del Estado Mayor de la Flota, el almirante Pastor y varios ministros.
Después de realizar unas maniobras con la escuadra en el Mediterráneo desde mediados de septiembre, el 10 de octubre de 1954 llegaron a Barcelona el crucero Cervantes y los destructores Gravina y Escaño, de la 2ª división de la Flota, mandados por el contraalmirante don Pascual Cervera y Cervera.
Con motivo de la estancia en Valencia del general Franco, llegaron a Valencia el 9 de octubre de 1954 varios buques de la 2ª división al mando del contraalmirante don Pascual Cervera, el crucero Cervantes, los destructores Gravina y Escaño y el minador Eolo, que llevaba a bordo al almirante don Luis Vierna, capitán general del departamento marítimo de Cartagena.
A primera hora de la tarde del 16 de febrero de 1955 entraron en Barcelona varios buques de guerra que, desde Galicia, realizan un viaje de instrucción, mandados por el comandante general de la flota almirante don Francisco de Abárzuza y Oliva. Salieron de Ferrol y recalaron en Cartagena y Valencia el crucero Canarias, buque insignia, y varios destructores, entre ellos el Gravina, de la 2ª flotilla, mandado por el capitán de fragata don Antonio Torres Menéndez.
El 12 de marzo de 1955 fondearon en Almería los destructores Gravina y Almirante Antequera para asistir a la entrega de la bandera de combate al nuevo dragaminas Almanzora.
Las tres divisiones de la flota realizaron maniobras de conjunto en el Mediterráneo en los meses de septiembre y octubre de 1955, concentrándose en Santa Pola. La escuadra visitó Barcelona el 4 de octubre. El 8 de octubre embarcó Franco en el crucero Canarias, desde donde presenció las evoluciones de la escuadra. Salió de puerto la noche del 8 de octubre y puso rumbo a las islas Baleares, seguido del resto de la escuadra. De vuelta en Barcelona, se celebró el 12 de octubre el día de la Hispanidad. El destructor Gravina estaba al mando del capitán de fragata don Antonio Torres Menéndez. La escuadra puso rumbo sur y recalaron en Cartagena la noche del 30 de noviembre.
A mediados de febrero de 1956 se realizaron maniobras en la bahía de Rosas. Participaron buques de la 1ª división de la Flota, con base en Ferrol y de la 2ª división, el crucero Cervantes y los destructores Gravina, Escaño, Almirante Antequera y Jorge Juan. Finalizadas las maniobras, regresaron a Cartagena el 3 de marzo de 1956. La 2ª división, al mando del contraalmirante Lallemand y compuesta por el crucero Cervantes y destructores Jorge Juan, Gravina y Almirante Antequera salieron de Palma de Mallorca rumbo a Cádiz, donde realizaron ejercicios de tiro durante una semana.
El 1º de agosto de 1957 comenzaron en Huelva los festejos para conmemorar la salida de las carabelas. Representando a la Marina, llegaron esa tarde los destructores Churruca y Gravina y el cañonero Martín Alonso Pinzón.
En octubre de 1957 se realizaron maniobras en el Mediterráneo. Mientras la Flota estaba concentrada en Palma de Mallorca durante las maniobras de conjunto, a primeros de noviembre de 1957 se recibió la orden de enviar tropas al Sáhara, apoyar al Ejército y patrullar la costa. Para cumplir las órdenes se crearon dos agrupaciones, la “A”, formada por los cruceros Canarias y Méndez Núñez y los destructores Churruca, Gravina y José Luis Díez, y la “B” con los cruceros Cervantes y Cervera y los destructores Miranda, Antequera, Jorge Juan y Escaño. El 4 de noviembre de 1957 llegó a Ceuta la Agrupación “A”, donde embarcó a la 6ª Bandera del Tercio Duque de Alba de la Legión, vehículos y pertrechos.
El crucero Méndez Núñez y los destructores Churruca, Gravina, al mando del capitán de fragata don Pascual Pery Junquera, y José Luis Díez, patrullaron la costa entre Ifni y Villa Cisneros entre el 9 y el 15 de noviembre para mostrar pabellón e impedir el contrabando de armas destinadas a los indígenas del Ejército de Liberación.
El 6 de diciembre de 1957 se recibió la orden de realizar una concentración naval frente a Agadir para disuadir a Marruecos de intervenir en el conflicto. A las 11 de la mañana del 7 de diciembre se realizó la primera pasada frente a Agadir rumbo norte a ocho nudos con los cañones apuntando a tierra por estribor. Iban mandados por el contraalmirante Meléndez y en línea de fila en el siguiente orden: cruceros Méndez Núñez, Canarias, destructores José Luis Díez, Gravina, Escaño y Almirante Miranda. Una hora y media después invirtieron la marcha y pasaron con los cañones apuntando por la banda de babor. Poco después de las cinco de la tarde se separaron los buques, regresando el crucero Méndez Núñez a Sidi Ifni con el destructor Gravina. Esta demostración tuvo su efecto disuasorio esperado y cambió la política de Mohamed V en su apoyo a las bandas.
A primeros de marzo de 1958 embarcó el ministro de Marina almirante Abárzuza en Cartagena en el crucero Miguel de Cervantes rumbo a las islas Canarias y de allí en avión a los territorios africanos. Regresó a Cádiz el 19 de marzo en el crucero Canarias, escoltado por el crucero Almirante Cervera y los destructores Gravina, Escaño y Jorge Juan.
Mandadas por el almirante don Pedro Nieto Antúnez, se iniciaron el 13 de junio de 1958 unas maniobras de desembarco “Alif” en las costas de Cádiz. Tomaron parte en el simulacro los cruceros Canarias, Cervera y Galicia, los destructores Churruca, Escaño, Gravina, José Luis Díez, Jorge Juan y Almirante Miranda, además de unidades de desembarco y helicópteros.
El 27 de octubre de 1958 salió de Cádiz para realizar unas maniobras de desembarco y ejercicios de tiro real en aguas de Cádiz la 3ª división de la Flota, mandada por el contraalmirante don Pedro Sans y formada por el crucero Galicia, los destructores Almirante Miranda, Ulloa, Churruca, Gravina y el dragaminas Bidasoa. Los ejercicios son denominados “Tigres”. A finales de octubre marchó a las costas gallegas la 3ª división de la Flota al mando del contraalmirante Sans Torres con el crucero Galicia y los destructores Churruca, Gravina, Ulloa y Almirante Antequera de la 3ª flotilla de destructores. Allí se reunió con el Canarias y la 1ª división de la Flota del contraalmirante Molins. El 10 de noviembre de 1958 salieron de Vigo para proseguir unas maniobras que comenzaron el 30 de octubre en alta mar, la 1ª y 3ª divisiones de la Flota, mandadas por el vicealmirante don Pascual Cervera y Cervera, que arbola su insignia en el crucero Canarias. Finalizadas las maniobras, salieron de Marín el 12 de noviembre rumbo a Santander, Bilbao y San Sebastián. Regresaron a Ferrol el 21 de noviembre de 1958. Con la llegada de los buques se puso fin a las maniobras realizadas en las rías bajas y mar Cantábrico.
En el año 1959 el destructor Gravina formaba parte de la 3ª división de la Flota, con el crucero Galicia y los destructores Churruca y Almirante Miranda.
En 1962 participó en varias maniobras en las islas Baleares, en Villagarcía de Arosa en mayo. El 11 de octubre de 1962 llegó a Puerto Rosario para llevar al ministro del Ejército don Pablo Martín Alonso. El 12 de noviembre llevó al ministro a Melilla.
Dado de baja el 31 de octubre de 1963. En diciembre de 1964 se puso a la venta junto a los destructores Churruca, Ulloa y Escaño.
Bibliografía:
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Álvarez-Maldonado Muela, Ricardo.: “50 aniversario del conflicto Ifni-Sáhara”. Revista General de Marina. Enero-febrero 2008.
Cervera Pery, José.: La guerra naval española (1936-39). Editorial San Martín. Madrid, 1988.
González, Marcelino.: Otros 50 Barcos españoles, Fundación Alvargonzález. Gijón, 2012.
Diarios ABC, La Vanguardia.
Semanario Vida Marítima.
Compilada por Santiago Gómez.
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