Rodriguez Cabrillo, Juan Biografia
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Juan Rodríguez Cabrillo
Marino portugués al servicio de España.
Orígenes
Vino al mundo en los últimos años del siglo XV, desconocemos el lugar.
Hoja de Servicios
Comenzó a navegar en buques de su país alcanzando gran fama de navegante, al comenzar la colonización española del continente americano, como muchos de sus paisanos paso a prestar sus servicios a la corona de España, por ello cruzó el océano con rumbo a Veracruz, donde estuvo comerciando entre los puertos de seno mejicano, pasados unos años se dirigió por tierra al puerto de Navidad, desde aquí prosiguió sus navegaciones bojeando las costa Oeste de Nueva España.
Como en dirección al Sur estaba casi descubierto todo, planteo hacerlo sobre la misma costa con rumbo al Norte, enterado el virrey don Antonio de Mendoza por mediación de don Pedro de Alvarado, le apoyó, así se construyeron dos naos o carabelas (es difícil clasificar estos buques, pues ni siquiera se conocen sus medidas y por tanto su desplazamiento) las San Salvador y La Victoria, se buscó gente de mar avezada logrando reunir ambas dotaciones, dando la vela desde el puerto de Navidad el 27 de junio de 1542.
La expedición está relatada día a día por ello muy extensa y prolija, lo que excede a nuestro trabajo, está firmado el manuscrito por don Martín Fernández de Navarrete e incorporado a la obra revisado por el capitán de corbeta don Luis Cebreiro Blanco, que consta en la bibliografía, por ello iremos sucintamente transcribiéndola.
Pasaron por el cabo de Corrientes el 29, al virar los vientos fueron contrarios resguardándose en el puerto de San Lucas el 6 de julio, al ser favorables salieron, el 8 doblaron la punta de la Trinidad donde volvieron fondear, el 12 zarparon pasando por el puerto de San Pedro el 13, al poco avistando otro puerto bautizado de la Magdalena, el 20 visitaron la punta de Santa Catalina continuando descubrieron el puerto de Santiago el 25, doblaron otro cabo y descubrieron otro puerto bautizándolo Santa Ana el 27, salieron el 31 pasando por el Puerto Fondo el mismo día, le pusieron el nombre por ser muy profundo, llegaron a otro el 1 de agosto llamado San Pedro Víncula, estando a la vista de la isla de Cedros, pasaron por la isla de San Esteban el 2, saliendo el 5 arribaron a la de Cedros el mismo día donde realizaron aguada y embarcaron leña, salieron el 10 el mismo día le siguió el puerto de Santa Clara, el 13 fueron bojeando la costa doblando la punta del Mal Abrigo, llegando el 19 por los malos tiempos a un nuevo puerto bautizado San Bernardo, prosiguieron y doblaron la punta del Engaño el 20, al salir de ella descubrieron un nuevo puerto, el 22 desembarco Cabrillo tomando posesión por el Rey de España, bautizándolo con el nombre de Posesión, lugar poblado por indios pescadores, aunque por la fuerza de la mar ellos vivían tierra adentro, salieron el 27 y al poco descubrieron otro puerto y por nombre San Agustín, donde permanecieron hasta el 30.
Salieron el 3 de septiembre y dos días más tarde otro puerto, le llamaron San Martín, protegido por tierras altas en sus cercanías, donde volvieron a realizar aguada y carga de leña por ser ésta muy abundante, zarparon el 8 continuando su viaje, el 9 descubrieron un poblado (la actual Santa Bárbara) siguieron y vieron el cabo de Cruz el 13, del que salieron el 17 navegadas seis leguas el mismo día otro buen puerto, por nombre San Mateo (actual de Ensenada en México) quizás el mejor de los hallados hasta ahora, continuaron viaje el 23, transcurridos tres días descubrieron tres islas, una de ellas mucho más grande, al archipiélago se le bautizó como Islas Desiertas, por no encontrar a nadie en ellas, navegaron unas leguas más y encontraron el 28 otro buen puerto por ello su nombre San Miguel, (actual bahía de San Diego) tanto que arriaron los botes y pescaron cambiando el menú, estando fondeados se levanto un furioso temporal que lograron sortearlo por lo bien abrigado del lugar, fueron visitados por naturales contando (por señas) que otros vestidos igual pero a caballo lanceaban a los indios, por ello estos les tenían mucho miedo, dieron la vela el 3 de octubre, el 7 estaban al lado de la islas que bautizaron San Salvador y la Vitoria, el mismo día zarparon y al siguiente hallaron la Bahía de los Humos, por ver muchos de ellos, salieron al siguiente viendo a las pocas leguas una gran ensenada, la bojearon prosiguiendo viaje hasta ver una población el 9 seguido, (es la actual Santa Mónica, cercana a Los Ángeles en los EE. UU.) de donde salieron varias canoas grandes a recibirlos, comunicándoles que otros igual estaban a seis días de camino, Rodríguez estuvo a punto de enviar dos hombres, pero los indios le dijeron enviaban ellos una canoa por el gran río para avisarles, lo nombraron el pueblo de las Canoas, desembarcaron y se tomo oficialmente posesión del territorio, el 13 dieron la vela a unas seis leguas encontraron dos islas grandes, regresando a tierra firme donde descubrieron un gran valle, al igual que la vez anterior salieron a recibirlos canoas, estás cargadas con pescado para vender, les dieron abalorios y se fueron tan contentos continuando viaje, el 15 navegaron como 10 leguas, durante la derrota no dejaron de llegar más y más canoas de todos los pueblos ribereños, llegando a entender sus nombres nativos, siendo los de Xucu, Vis, Sopono, Alloc, Xabaagua, Xacotoc, Potoltue, Nacbuc, Quequeme, Misinagua, Elquis, Coloc, Mugu, Xagua, Aracbuc, Partocac, Suniquei, Quanmugua, Asimui, Aguen, Casalic, Rucumu, Yncpupu, estando todos estos desde el de Canoas que ellos llaman Xucu en una distancia máxima de 18 leguas.
El 16 zarparon costeando, por la tarde divisaron otros dos pueblos, repitiéndose el contacto con los habitantes con sus canoas, continuaron y al día siguiente sobre las diez de la mañana toda la costa estaba poblada, las canoas no pudieron acercarse por haberse levantado la mar, llegando a una punta o cabo, al que nombraron Galera, virando para abrirse divisando dos islas una muy grande la otra muy pequeña, alejadas de tierra como 10 leguas, fueron nombradas San Lucas, estando en la mayor Poseidón, llamada por los naturales Ciquimuesmu, por tener un buen puerto, de pronto el mar se enfureció esperando que calmara permanecieron tres días, salieron el 25 acercándose a tierra, pero roló el viento y no pudieron salvar el cabo Galera y al tener que correr el temporal retrocedieron 10 leguas, dos días más sin poder ganar algo de mar por los vientos contrarios, en la media noche del 1 de noviembre consiguieron avanzar algo, pero al alba refrescó de tal forma que tuvieron que buscar refugio al abrigo del cabo de Galera, donde desembarcaron por visitar un gran pueblo llamado Xexo, pero les engañó la vista y estaba muy lejos, decidiendo acercarse al de Sardinas donde cargaron agua y leña, por el buen comportamiento del abrigo del cabo, le llamaron puerto de Todos Santos, permaneciendo tres días hasta rellenar lo necesario a bordo, esto gracias al apoyo prestado por los naturales. El pueblo de Sardinas, en su nombre original es Cicacut, siguiéndoles hasta el cabo Galera; Ciucut, Anacot, Maquinanoa, Poltatre, Anacoac, Lesino, Caacac, Paltocat, Tocane, Opia, Opistopia, Nocos, Yutum, Quiman, Nicoma, Caromisopona, al parecer el primer pueblo era la cabeza del resto, donde vivía su jefa quien durmió dos días en la capitana.
El 6 de noviembre salieron de Sardinas, pero casi no se movieron, tanto es así que el 11 llegaron al cabo de Galera, a partir de aquí por rolar el viento navegaron algo más, divisando una cordillera muy alta, no encontrando población alguna en 20 leguas, pero eso si, por verse desde la mar le pusieron el nombre de Sierra de San Martín, por la noche dado que la misma cordillera llega al mar, estaban vigilantes para no ser aconchados sobre ella, poco antes de amanecer el viento se endureció, comenzó a llover cerrando el horizonte, el tiempo obligo a cada cual a valerse de sus medios, por ello quedaron separados los bajeles, permaneció durante dos días, el 13 comenzó a mejorar, intentando poner más vela para localizar a la separada, al mismo tiempo que buscar un lugar donde poder reparar los daños, el 15 divisaron a la compañera, llegando a la voz pasado el medo día, la tierra era buena pero sin refugio, al amanecer del 16 estaban en la entrada de una ensenada muy grande, pero su interior no permitía dar la banda por ello tomaron posesión de ella y con el nombre de Pinos (actual bahía de Monterrey) por los muchos que había, salieron continuando su navegar, pues la mar de nuevo estaba alborotada, el 18 llegaron al cabo de San Martín. Toda esta costa últimamente recorrida es muy brava, por tener las montañas muy altas que llegan al mar, de hecho al moverse viento les caían rociones de nieve, por esta razón la bautizaron como Sierras Nevadas, al principio de ella hay un cabo al que nombraron Nieve y está situado en 38º 2/3 N. El 23 arribaron de regreso a las islas de San Lucas en la de Poseidón, buscando un lugar para reparar pero no encontraron nada adecuado, por ser la costa muy brava, estando en ella se levantó de nuevo un temporal, por estar bien fondeados pudieron mantenerse.
Al parecer en esta isla la vez primera cuando desembarcaron, don Juan Rodríguez sufrió una caída, con tan mala fortuna que se rompió un brazo por el hombro y de nuevo en ella el 3 de enero de 1543 falleció, por ocurrir esta desgracia cambiaron el nombre de la isla por la de su descubridor, Juan Rodríguez, es la actual de San Miguel en el paralelo 34º N, casi enfrente de Santa Bárbara; es de suponer fue enterrado en ella.
Dejó encargado proseguir la expedición al piloto mayor don Bartolomé Ferrelo, continuaron en ellas hasta abonanzar el tiempo, lo que no ocurrió hasta el 19 siguiente, cuando salieron de la isla de Juan Rodríguez, al poco de estar en la mar se levanto un fuerte temporal, obligándoles a entrar en otra de las islas de San Lucas, siendo la de Limun, pero la falta de un buen resguardo decidieron soportarlo en mar abierto, por ello estuvieron ocho días dando vueltas a las islas, no entrando en el puerto de salida hasta el 27 seguido, el 29 al mejorar dieron la vela a la isla de San Lucas, por nombre nativo Nicalque la que está en el centro de todas ellas a recoger unas anclas, dieron la vela el siguiente 12 de febrero, no siendo posible antes por el mal tiempo arribando al de Sardinas, donde cargaron leña y agua, volviendo a salir el 14 por la mucha mar llegando a San Salvador, donde estaban mucho más seguros, el 18 seguido salieron con rumbo al sudoeste donde descubrieron otras seis islas grandes, el 22 seguido viraron hacía tierra firme, pues se habían alejado algo más de 100 leguas y siempre con mucha mar, el 26 divisaron el cabo de Pinos, el 27 de nuevo se endureció el temporal, el 28 el viento fresco lo tuvieron que correr por ser de mucha furia, tanto que en ocasiones las olas arrasaban las cubiertas de los bajeles, sin existir refugio alguno para los hombres, tanto era así que se dieron todos por perdidos, en estas pésimas condiciones se mantuvieron hasta abonanzar el tiempo el 4 de marzo, llevándose la sorpresa de encontrase frente al cabo de Pinos, el 5 estaban frente a la isla de Juan Rodríguez, pero dada la mala mar no intentaron ni entrar, arrumbando a la de San Salvador donde fondearon; en el transcurso de la tormenta el bajel pequeño volvió a desaparecer, por ello el 8 zarparon con rumbo a tierra para intentar saber lo ocurrido al compañero, llegando al pueblo de Canoas, donde nada se les pudo indicar, el 9 salieron regresando a San Salvador, pero tampoco se encontraba allí, el 11 llegaron a San Miguel no encontrándose en él, fondearon y esperaron seis días, durante este tiempo la opinión se fue generalizando que lo pertinente era regresar a Nueva España, donde dejaron señales por si el compañero arribaba, el 17 salieron con rumbo a San Mateo, donde tampoco la encontraron, el 18 por la tarde zarparon llegando el 21 a Poseidón donde tampoco se encontraba, esperaros dos días voltejeando sin atreverse a entrar por la mucha mar, por la noche arrumbaron a la isla de Zedros donde fondearon al día siguiente, el 26 vieron con gran alegría la llegada de la conserva, permanecieron hasta el 2 de abril dando la vela con rumbo directo a Nueva España, donde fondearon en el puerto de Navidad el 14 seguido, poniendo fin a una expedición de las muchas que se realizaron en aquella época.
Bibliografía:
Díaz del Castillo, Bernal.: Historia verdadera de la conquista de la Nueva España. Espasa-Calpe. Madrid, 1933. 2 Tomos.
Guillén Tato, Julio Fernando.: Colección de Diarios y Relaciones para la Historia de los Viajes y Descubrimientos. Instituto Histórico de Marina. Madrid 1943 a 1975. Siete tomos. Revisado por el capitán de corbeta don Luis Cebreiro Blanco. Tomo I = Camargo 1539, Rodríguez Cabrillo 1542, Pedro de Valdivia 1552, Antonio de Vea 1675, Iriarte 1675, Quiroga 1745.
VV. AA.: Enciclopedia General del Mar. Garriga. 1957-1968 y Apéndice de 1988. 9 tomos.
VV. AA.: Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo Americana. Espasa-Calpe. 122 tomos. Completa.
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