Nuestra Senora de Begona (1713)
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Navío construido en Génova en 1703 y comprado a un armador italiano en 1713. Sus medidas en codos son las siguientes: 63 codos y medio de quilla, 70 codos y ¼ de eslora, 20 codos y ¼ de manga, 9 codos de puntal, 20 codos de mura, 19 codos de cuadra, 905 toneladas de arqueo y una tripulación de 450 hombres. En pies de Burgos medía 127 de quilla, 140 de eslora, 40 y 6 pulgadas de manga, 18 de puntal, 40 de mura. Armado con 54 cañones, 10 de a 24 libras y 12 de 12 libras en la primera batería, 22 de a 8 libras en la segunda batería, 8 de a 6 libras en el alcázar y 2 de a 8 libras en el castillo de proa. Su otro nombre ó alias Campanela era su antiguo nombre italiano, que siguió usándose en la Real Armada.
Con la escuadra de don Manuel López Pintado tomó parte en el bloqueo de Barcelona a partir de 1713, mandado por el capitán de navío don Blas de Lezo Olavarrieta. Junto al navío Nuestra Señora del Carmen, alias Lanfranco, formaba división al mando del almirante (jefe de escuadra) don Andrés Matías de Pez y Marzaraga.
Esta escuadra había salido de Cádiz el 12 de septiembre de 1713 y estaba compuesta por los navíos Nuestra Señora de Begoña, alias Campanela, Nuestra Señora de Guadalupe, capitana de la Armada de Barlovento, Nuestra Señora del Carmen, alias Lanfranco, las fragatas Nuestra Señora de Atocha, de 38 cañones, Nuestra Señora del Mar, 38 cañones, Águila de Nantes, 36 cañones, Nuestra Señora de los Reyes, 30 cañones, San Francisco de Paula, 30 cañones, Sacra Familia, 28 cañones, Santo Cristo de Veracuz, 24 cañones, y los buques menores Santo Cristo de San Román y Santo Cristo de San Martín, de 18 y 8 cañones respectivamente. La mayoría eran mercantes armados poco aptos para combatir.
Su éxito en la expedición se debió a no tener que enfrentarse a una verdadera fuerza naval enemiga. La ciudad es tomada el 11 de septiembre de 1714. Mientras Barcelona era bombardeada, el capitán Lezo se acercó con su navío para batir mejor sus defensas y una bala de mosquete le atravesó el antebrazo derecho, aunque no hubo necesidad de amputárselo.
En septiembre de 1714 fue a Génova al mando del capitán de navío don Blas de Lezo e insignia de don Carlos Grillo, con los navíos del jefe de escuadra don Andrés de Pez para traer a España a la reina doña Isabel de Farnesio y desembarcarla en Alicante. El 30 de septiembre embarcó la reina en el puerto de Sestri Levante. La corta travesía fue una terrible experiencia para la reina por la fuerte tormenta con que se encontraron. Al llegar a Génova la reina se negó a hacer el viaje por mar como estaba previsto y decidió hacerlo por tierra, regresando la escuadra a Barcelona para preparar la siguiente expedición, la recuperación de Mallorca.
El 16 de junio de 1715 participa, al mando del capitán de navío don Blas de Lezo, con la escuadra del general de la Armada don Pedro Gutiérrez de los Ríos, conde de Fernán Núñez, en la protección del desembarco en Calonge, cerca de Alcudia, Mallorca, que se produce el 15 de junio. La escuadra zarpa de Barcelona el 11 de junio y estaba compuesta por 200 velas, entre estos 27 buquqes de guerra, y las tropas al mando del general francés d’Aspheld.
El 21 de agosto de 1715 zarpa de Cádiz con la Flota de don Manuel López Pintado rumbo a Veracruz, al mando del capitán don Andrés Guisado, haciendo de nave almiranta, siendo la capitana, el navío Nuestra Señora de Guadalupe, además de la fragata Príncipe de Asturias, alias Infante. Esta escuadra llega a Veracruz el 1 de noviembre. Para su regreso a Cádiz zarpan de Veracruz el 21 de mayo de 1716.
El 28 de julio de 1717 zarpa de Cádiz como capitana de la Flota de Nueva España del jefe de escuadra don Antonio Serrano rumbo a Veracruz, al mando del capitán don José Alcañiz de Zamora, con el navío almiranta Nuestra Señora de Guadalupe y el navío Nuestra Señora de Gracia, que hacía de patache. Las once naves mercantes y la escolta llegan a Veracruz el 9 de octubre de ese año. Para su regreso a la Península zarpan de Veracruz el 8 de mayo de 1718, haciendo escala en la Habana el 13-14 de junio, de cuyo puerto zarpan el 30 de mayo y llegan a Cádiz el 16 de agosto de 1718.
El 21 de abril de 1719 zarpa de Cádiz formando una escuadra de azogues con la fragata Príncipe de Asturias, alias Infante, el mercante Santo Cristo de Maracaibo, armado con 12 cañones, y el buque Caballo Marino, con destino a La Habana y Veracruz para potenciar la presencia naval española en el Caribe e informar a las autoridades de la guerra con los británicos, llevando cartas para el gobernador y oficiales de la Habana, Veracruz y para el virrey de Nueva España.
Al mismo tiempo zarpan de Cádiz otros tres buques de guerra para dar escolta a la división anterior y de la que se separaron el 24 de junio a la altura del cabo San Antonio. Mientras la mayor parte de esta escuadra llega a Veracruz los días 5 y 6 de julio, el navío Nuestra Señora de Begoña y la fragata Infante entran en Veracruz a mediados de agosto.
Mientras las operaciones militares ocurrían en la costa de Florida, en especial Pensacola, la escuadra de Francisco Cornejo esperó en Veracruz órdenes del virrey marqués de Valero para alistar sus buques de guerra y reforzar con tropas, armas y buques al comandante Carrascosa en Pensacola, pero el virrey estimó que era más importante dar escolta a los buques de comercio.
Por fin, el 23 de diciembre de 1719, al mando del almirante don Diego de Alarcón y Ocaña, zarpa de Veracruz el navío Nuestra Señora de Begoña, alias Campanela, con los navíos San Luis, San Juan Bautista y la fragata mercante San Cristo de Maracaibo para unirse en la Habana a otros buquesde guerra y acudir al socorro de Pensacola. El navío comandante, el Campanela, pudo fondear a siete leguas de Campeche tras un fuerte temporal, mientras los navíos San Luis y San Juan Bautista naufragaron.
