Combate naval del 25/I/ 1797
De Todoavante.es
Parte del combate dado por el Comandante del navío San Francisco de Asís, don Alonso de Torres y Guerra, contra cuatro fragatas británicas.
« Excmo. Sr. — En oficio escrito á V.E. con fecha del 20, en que dí fondo en el placer de Rota con viento á SE., le manifestaba haberlo verificado por la señal de la torre; pero habiéndome en la noche cargado el E. muy duro, y garrando las anclas, traté de libertar el navío dando la vela y picando los cables; sotaventado, no he podido ganar para el E. hasta esta fecha, pues no han dejado de reinar estos vientos. También manifestaba á V. E. haber visto dos fragatas inglesas á quienes dí caza hallándolas solas, y que por el reconocimiento que hice á una embarcación dinamarquesa, me aseguró ser tres las de esta nacion; Pero este oficio no hubo por quien remitirlo, y en el día debo aumentar, no con poca satisfacción mia, que el 25 al amanecer, sobre la bordada del Norte, casi en el paralelo de Cádiz; distancia de 10 á 11 leguas, avisté cuatro buques que no dudé eran enemigos, pues no contestaron á las señales de reconocimiento correspondientes, para cuyo fin abrí uno de estos pliegos, y habiendo virado sobre este navío, empezaron á darme caza dos fragatas de 40 cañones, una de 34 y una corbeta de 26 á 28; yo continué la bordada con toda mi fuerza de vela; pero á pesar de todas mis diligencias, como abonanzó el tiempo, se conoció era indispensable el combate, por lo que me entregaban: á la una del día, estando casi á tiro de cañon, les afirmé el pabellon y me preparé para una gloriosa accion.
Sí, Excmo. Sr., gloriosa fué en todas sus partes: inmediatamente correspondieron con el suyo, y seguidamente les rompí el fuego sin intermision hasta las cuatro; pero con tanto acierto, tan vivo y sin confusion, que no quedó duda á los enemigos era temeraria su empresa: alternativamente me batía una fragata de 40 y una pequeña á corta distancia que me incomodaba la metralla; los cuatro guarda-timones de la primera y segunda batería fueron mi defensa, batiéndome en retirada, dando de tiempo en tiempo una orzada ó arribada. Al jefe de aquella division, que trató de acercárseme, le presente el costado; no tan solamente no pudo resistir mi descarga cerrada, sino que sin acabar de darme la suya, amolló su popa, rendida la verga de mesana y con otras averías; otra fragata quedó desarbolada del mastelero de velacho, y todas con bastantes descalabros á la vista, quedando tan escarmentado el expresado Jefe de division, que no se volvió á presentar á tiro.
A las cuatro de la tarde se pusieron en facha fuera del tiro de cañon y consultaron entre sí, echando un bote al agua que transitaba de una á otra de las fragatas; á las cuatro y media volvieron al combate, que continuó hasta las cinco que se separaron por segunda vez. Conociendo ya que me empeñaba en la costa entre Ayamonte y Huelva, y que se acababa el dia, traté de virar en vuelta del E., y pasando por entre los buques enemigos, batiéndome por ambas bandas para concluir la accion. Sin duda los ingleses se persuadieron me obligaban á embarrancar en la costa; pero cuando vieron mi determinacion, arribaron paulatinamente y esperando la noche para verificar su retirada, dejándonos el mar de batalla, á las ocho ya estaban fuera de la vista.
Ponderar yo, Sr. Excmo., el ardor de los oficiales, guardias marinas, Contador y Capellanes; el ardimento de la tropa y el desempeño de la marinería, sería asunto prolijo por las distintas circunstancias que ocurrieron, y así me limito á manifestar á V. E., que los primeros son el segundo Comandante capitán de fragata D. Juan de Dios Topete, el teniente de navío D. Antonio Tiscar, los de fragata D. José Prado y Lamas y D. Francisco Ampudia, el alférez de navío D. Antonio Gamboa y los de fragata D. Manuel de Cañas, D. Silvestre Madrazo Escalera y D. Hilario Artacho y la Torre, el teniente de brulot D. Antonio de la Cámara y los guardias marinas D. Nicolás Mecaña y D. Francisco Topete. Tambien debo recordar á V. E. el primer condestable D. Antonio de Cámara, al primer cabo de brigada Matías Fernandez Heres, al soldado Alonso Perez y al farolero Francisco Fernandes Gayoso, quienes, por el acierto de las punterías y por el trabajo particular, han sobresalido.
Las averías recibidas en este navío han sido: un balazo en la verga mayor, otro á flor de agua, mucha cabullería cortada y varios en el velámen y en los costados, teniendo dos hombres muertos y 12 heridos.
Ruego á V. E. que si considera esta accion digna de la soberana inteligencia de S. M., se sirva elevarla á los piés del trono.
Dios guarde á V. E. muchos años. Navío Asís, al ancla en la bahía de Cádiz, 28 de enero de 1797. — Excmo. Sr. — Alonso de la Torre-Guerra. — Excmo. Sr. D. Felipe Lopez de Carrizosa. »
Bibliografía:
Paula Pavía, Francisco de.: Galería Biográfica de los Generales de Marina. Imprenta J. López. Madrid, 1873.
Transcrita con la escritura de la época, de ahí el problema, sobre todo, con los acentos.
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