Guadiaro (1953)
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Construcción:
Procedencia desconocida.
A finales de 1946 se decidió construir una segunda serie de siete dragaminas de la clase Bidasoa, autorizada el 7 de enero de 1947. Se construyeron los dos primeros en Cartagena y los otros cinco en La Carraca, por la Empresa Nacional Bazán.
Se realizó el proyecto en base a una mejora de los siete dragaminas anteriores. Se sustituyeron las calderas de carbón por otras de petróleo, se mejoró el casco y la compartimentación. Por estas pequeñas diferencias, estos siete dragaminas de la segunda serie se conocieron como clase Guadiaro.
Recibieron las marcas de costado DM, seguido por números correlativos del 8 al 14, correspondiendo al Guadiaro el DM-8.
Con un desplazamiento de 534 toneladas estándar, 651 a media carga y 749 a plena carga, medía 61,95 metros de eslora, 8,50 de manga, 3,65 de puntal y calado de 2,10 metros estándar y 2,50 a plena carga. Su dotación era de 80 a 90 hombres.
Disponía de dos máquinas de triple expansión Bauer-Wach, dos caleras acuotubulares, dos ejes, con una potencia total de 2.400 caballos y una velocidad de 16,5 nudos. Con una capacidad para almacenar 150 toneladas de combustible, disponía de una autonomía de 3.000 millas a 10 nudos.
Armado con un cañón de 105 mm, uno de 37 mm, un montaje de dos ametralladoras de 20 mm, 16 cargas de profundidad y un equipo de rastreo mecánico.
Historial
Al dragaminas Guadiaro se le colocó la quilla en Cartagena el 24 de noviembre de 1948. Fue botado el 26 de junio de 1950 y entregado a la Armada el 9 de abril de 1953. Fue su primer comandante el capitán de corbeta don Juan Rubio Valet.
El 15 de octubre de 1953 se realizó una revista naval en Cádiz con la presencia del jefe del Estado, quien embarcó en el crucero Canarias. Tomaron parte los siete dragaminas de la serie Bidasoa, además de Guadiaro, que tenía izada la insignia del capitán de fragata don Enrique Barbudo.
Los siete dragaminas de la segunda serie fueron incluidos en el programa de modernización de buques, realizando las modificaciones en la factoría de La Carraca. Costó unos once millones por unidad. El Guadiaro volvió a entrar en servicio el 14 de octubre de 1959.
Se mejoraron los equipos de navegación, comunicaciones, seguridad interior e instalación eléctrica, además de la instalación de un equipo de desmagnetización del casco. Se le instaló un radar de exploración de superficie Decca 45. El armamento fue desmontado y sustituido por un montaje doble de cañones antiaéreos de 20 mm, dos montajes portátiles de lanzacohetes antisubmarinos Mk 20 para proyectiles de 183 mm y un equipo de rastreo para minas de contacto, acústicas y magnéticas para lo que disponía de un sonar modelo QCU-2, ya anticuado en 1960.
A causa de las obras de modernización, el desplazamiento pasó a ser de 625 toneladas estándar y 769 a plena carga, con un calado medio de 2,55 metros. La velocidad se redujo a 15 nudos y la capacidad de carga de combustible se redujo a 94,5 toneladas, reduciendo su autonomía.
Durante y después de la modernización de los dragaminas de hierro tipo “A”, como fueron designados, siendo el tipo “B” los de la clase Nalón, a finales de los años 50 se creó la 1ª escuadrilla de dragaminas, donde se incorporaron los del tipo “A”.
En 1960 fue destinado a aguas del Cantábrico junto al dragaminas Almanzora, ostentando los numerales 35 y 36. Junto a cuatro unidades de la clase Nalón, formaron una escuadrilla de dragaminas de forma temporal.
A partir de 1960 se crean las tres escuadrillas de dragaminas con base en cada uno de los departamentos marítimos al mando de un capitán de fragata. El Nalón, Tajo, Duero y Júcar del tipo “B”, y los Guadiaro y Tinto, del tipo “A”, además del minador Eolo, como buque nodriza, se encuadraron en la 1ª escuadrilla con base en Cádiz.
En 1961 cambiaron los siete dragaminas sus numerales, correspondiendo al Guadiaro el M-11 y de forma correlativa los siguientes, excepto los dos últimos, Eo y Guadalhorce, que se intercambiaron.
La mañana del 24 de abril de 1962, comenzaron unas maniobras en aguas de Málaga en las que participaron varios buques de la Agrupación Naval del Estrecho, al mando del contraalmirante Ricardo Benito Ferrera. Tomaron parte el crucero Galicia, buque insignia, el destructor Gravina, tres lanchas de desembarco LSM, las barcazas BDK-3 y BDK-4, las corbetas Nautilus, insignia, Diana, Atrevida y Villa de Bilbao y los dragaminas Guadiaro, Tinto, Tajo, Duero, Nalón y Júcar. Las maniobras finalizaron el 27 de abril.
El 16 de noviembre de 1962 llegaron a Málaga para realizar varios ejercicios con el crucero Canarias la primera escuadrilla de dragaminas, formada por el minador Eolo y los dragaminas Guadiaro, Tinto, Nalón, Júcar, Tajo y Duero.
La flotilla de dragaminas formada por el Duero, Tajo, Júcar, Ter y Guadiaro, se encontraban en Ceuta en febrero de 1963. Desde el 14 de febrero buscaron un pesquero marroquí a la deriva, encontrado por el Ter a 25 millas al sudeste de Ceuta y llevado a remolque a puerto.
El 4 de junio de 1963 llegaron a la bahía de Algeciras varios dragaminas de la escuadrilla con base en Cádiz, mandados por el capitán de fragata don Ricardo Jara Serantes. Estaba compuesta por el minador Eolo y los dragaminas Guadiaro, Tinto, Duero y 'Tajo. Realizaron maniobras hasta el día 8 que regresaron a Cádiz.
En los primeros días de julio de 1963 llegaron a Málaga el minador Eolo y los dragaminas de la 1ª escuadrilla Tinto, Guadiaro, Júcar, Nalón, Tajo, Duero, Bidasoa y Segura. Estaban al mando del capitán de fragata don Ricardo Jara, jefe de la escuadrilla. Realizaron unas maniobras conjuntas, denominadas “Berx-63”, con los dragaminas portugueses Ponta Delgada y Angra do Heroismo.
Después de realizar unos ejercicios en el Mediterráneo, la Agrupación Naval del Estrecho entró de visita en el puerto de Melilla el 1º de octubre de 1963. Estaba compuesta por el crucero Galicia, las corbetas Atrevida, Princesa, Diana y Nautilus, los dragaminas Guadiaro, Nalón, Duero, Tajo, Júcar y el minador Eolo.
El 17 de octubre de 1964 finalizaron unas maniobras hispano-portuguesas en aguas de Lisboa. La formación española estaba compuesta por el minador Neptuno y los dragaminas Guadiaro, Tinto, Nalón, Júcar, Duero y Tajo. Entre el 26 y el 30 de octubre de 1964 tuvo lugar una operación de desembarco en las playas de Mazagón. Tomaron parte buques y aviones norteamericanos, además de infantes de marina españoles y los dragaminas Guadiaro, Tinto, Nalón, Júcar, Duero y Tajo.
A finales de enero de 1966 se iniciaron unas maniobras en el Mediterráneo con la 41ª escuadrilla de corbetas y la 1ª escuadrilla de dragaminas con base en Cádiz, formada por el Tinto, insignia del capitán de fragata don Ignacio Roji Chacón, Guadiaro, Duero, Nalón, Guadalhorce y Júcar. En la primera semana de febrero se unieron en Melilla varios destructores, un submarino, los dos transportes de ataque, tres buques de desembarco LSM y dos BDK para efectuar hasta el 13 de febrero ejercicios en aguas de Canarias.
Al mediodía del 12 de marzo de 1966 llegaron a Sevilla varios dragaminas de la 1ª escuadrilla con base en Cádiz, Tinto, Tajo, Guadiaro y Duero, mandados por los teniente de navío Junquera Ruiz, Vila Miranda, Carrero Pichot y Bazán Lacraustra, respectivamente. Permanecieron en el puerto hasta el día 15.
En la última decena del mes de mayo de 1966 se realizaron unas importantes maniobras en la costa de Levante en las que participaron la 1ª, 2ª y 3ª escuadrillas de dragaminas y sus respectivos buques de apoyo, Eolo, Neptuno y Tritón. Participaron los dragaminas Eume, Eo, Guadalhorce, Guadiaro, Navia, Tinto, del tipo “A”, y los 12 dragaminas de la clase Nalón, todos al mando del capitán de navío don Gabriel Pita da Veiga.
Entre el 10 y el 15 de octubre de 1966 se iniciaron unas maniobras hispano-portuguesas llamadas “Iberex-66” en la costa de Lisboa. Tomaron parte los dragaminas españoles de la 1ª escuadrilla con base en Cádiz y mandada por el capitán de fragata don Luis González Martínez, y cinco dragaminas portugueses.
Entre el 19 y el 25 de noviembre de 1966 se realizaron las maniobras “Hispania-III” en aguas de Cádiz. Participaron tres destructores, tres corbetas, un submarino, un transporte de ataque y un petrolero, además de los dragaminas Tajo, Guadiaro, Nalón y Tinto y aviones con base en Morón y Málaga.
La mañana del 30 de septiembre de 1968 llegó a Lisboa una escuadrilla de dragaminas al mando del capitán de fragata don Feliciano Mayo Jaimez, formada por el minador Eolo y los dragaminas Guadiaro, Tinto, Nalón, Júcar, Tajo y Duero. Los días siguientes efectuaron unas maniobras con buques portugueses en aguas del puerto de Lisboa.
El día 24 de enero de 1969 llegaron a Málaga siete dragaminas para realizar ejercicios en la costa malagueña hasta el día 28. Eran el Tinto, Guadiaro, Nervión, Nalón, Duero y Júcar.
La segunda semana de marzo de 1969 se realizaron unas maniobras en aguas de las rías bajas. Tomaron parte las tres escuadrillas de dragaminas, la 1ª escuadrilla con base en Cádiz, con el Guadiaro, Tinto, Tajo y Duero, mandados por el capitán de fragata Mayo Jaimez, con insignia en el minador Eolo. También tomaron parte en los ejercicios los patrulleros Pegaso y Procyon y el remolcador RR-20 con base en la Escuela Naval Militar de Marín, y el buque de salvamento Poseidón.
El 7 de mayo de 1969 llegaron a Huelva los dragaminas Guadiaro, Tinto, Duero, Tajo, Júcar y Nalón. Al mando del capitán de fragata don Gabino Aranda Carranza realizaron varios ejercicios de rastreo de minas.
Entre el 15 y el 25 de octubre de 1969 se realizaron en el golfo de Cádiz las maniobras “Iberex-69” de medidas contra minas con buques españoles y portugueses. Participaron los dragaminas portugueses Lajes y Santa Cruz, mandados por el capitán de fragata don Sebastiao Alves dos Santos, y los españoles Guadiaro, Tinto, Nalón, Júcar, Duero y Tajo. Mandaba esta 1ª escuadrilla de dragaminas el capitán de fragata don Gabino Aranda de Carranza.
El 7 de octubre de 1970 comenzaron unas maniobras en aguas portuguesas con la 1ª escuadrilla de dragaminas españoles, mandada por el capitán de fragata don Gabino Aranda Carranza. La escuadrilla estaba compuesta por el minador Eolo, los dragaminas Guadiaro, Tinto, Nalón, Jucar, Duero y Tajo y el buque de salvamento Poseidón. Las maniobras finalizaron el 17 de octubre, cuando la escuadrilla abandonó Lisboa.
Desde comienzos de los años 70, sustituyeron a los dragaminas de la primera serie en sus funciones de vigilancia marítima, a pesar de su velocidad y armamento inadecuado. Se le desmontó el equipo de rastreo.
Del 1º al 7 de julio de 1971 se realizó la III Semana Naval del Mar de Alborán en aguas de Melilla y del 8 al 13 de julio en Almería. Participaron más de treinta buques de la Armada, entre ellos los dragaminas guardacostas Guadiaro, Segura, Tambre, Ter y Tinto, y los dragaminas Nalón, Júcar, Tajo y Duero.
Dado de baja el 15 de mayo de 1977. Arrastrado por un remolcador, fue hundido en unos ejercicios de tiro realizados en la ría de Pontevedra en los que participaron el portahelicópteros Dédalo, el destructor Churruca y las fragatas Baleares, Cataluña y Andalucía.
Bibliografía:
Aguilera, Alfredo y Elías, Vicente.: Buques de guerra españoles, 1885-1971. Editorial San Martín. Madrid, 1980.
Coello Lillo, Juan Luis.: Buques de la Armada española. Los años de posguerra. Aqualarga. Madrid, 2000.
Diarios ABC, La Vanguardia.
García, Dionisio.: “Clase Bidasoa. Dragaminas alemanes en la Armada española”. Revista Serga. Julio-agosto 2007.
Compilada por Santiago Gómez.
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