Caro y Sureda, Jose Biografia
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Biografía de don José Caro y Sureda
Capitán de navío de la Real Armada Española.
Teniente general de los Reales Ejércitos de España.
Orígenes
Vino al mundo en la ciudad de Palma de Mallorca, islas Baleares, el 4 de julio de 1764. Era hijo de don Pedro Caro y Maza de Lizana, Capitán General de los Ejércitos de España, quien halló la muerte al mandar una carga de caballería del regimiento de Dragones de Almansa el 1 de julio de 1775 en la fracasada toma de Argel. Y de doña Margarita Sureda y Togores. Y hermano de don Pedro Caro y Sureda, III Marqués de la Romana.
Hoja de Servicios
Sentó plaza de guardiamarina en la Compañía del Departamento de Cádiz el 14 de julio de 1775, por la misma carta-orden que su hermano don Pedro, con dispensa de edad. Moreno le incluye como caballero de la Orden de Malta, es cierto que en ella hay un José Caro Fontes, pero ni por ascendientes, ni por fechas es posible sea el mismo. No figura número de expediente en la obra de Válgoma, siendo el 1.911 en el segundo tomo.
A pesar de lo anterior, en la misma obra de Válgoma tomo IV con el número 3.976, nos encontramos con un José Caro y Tomás, hijo del mismo padre, pero respecto a su madre nos dice textualmente: Margarita-Melchora Tomás «antes Sureda» Togores Fortuny y Salas. Al parecer fue de los que al entrar en servicio las dos Compañías, fue trasladado a la de Cartagena, figurando en el folio 112 y sentando plaza el 29 de septiembre de 1778. Expediente N.º 3.343. A parte del cambio de apellido de la madre que lleva a error, pues no se entiende pudiera cambiarlo.
El 22 de junio de 1779 se declaró la guerra a la Gran Bretaña y se armó una escuadra al mando del general don Luis Córdova, formada por treinta y un navíos, siete fragatas, dos urcas, dos brulotes, una saetía y una tartana, siendo el buque insignia de ella el Santísima Trinidad, por ello recibió la orden de embarcar en uno de los buques, zarparon de Cádiz doblando el cabo de San Vicente y poniendo proa al Norte, al encontrarse a la altura del cabo de Finisterre, se unió la escuadra del Ferrol compuesta por ocho navíos y dos fragatas, al mando del teniente general don Antonio de Arce prosiguieron rumbo al N., encontrándose con la escuadra francesa al mando del conde d’Orvillers compuesta por treinta navíos, dos fragatas, siete buques menores y tres brulotes, quedando como jefe de la combinada don Luis de Córdova.
Continuaron rumbo al Canal de la Mancha, donde el 31 de agosto avistaron a la escuadra británica compuesta por treinta y seis navíos, ocho fragatas y otros buques menores, al mando del almirante Hardy, quien al ver su inferioridad optó por buscar refugio en sus bases y arsenales, por ello solo se pudo apresar al navío Ardent, de 74 cañones, dejando limpio de enemigos la mar, permanecieron unos días sobres sus aguas pero ante la ausencia total de enemigos optaron por regresar cada escuadra a su puerto base.
Al respecto de esta demostración de fuerza en las propias aguas británicas, Paula y Pavía nos dice: «Desde los tiempos de la Invencible no habían surcado los mares flota tan formidable; y rara vez, se había hallado menos dispuesta aquella potencia para resistirla. La escuadra inglesa del almirante Hardy apenas contaba con 38 navíos; las tropas eran muy pocas, las plazas marítimas en muy mal estado, y el pueblo inglés se encontraba dividido por intestinas discordias; todo, pues, incitaba á la empresa; sin embargo, por extraño que parezca, nuestros valientes marinos tuvieron que renunciar á ella, bien a su pesar; la opinión del almirante francés llegó á sobreponerse á la de D. Luis de Córdova, y ambas escuadras se limitaron á cruzar en la embocadura del canal de la Mancha en espectativa de la inglesa…»
Permaneció en la misma escuadra, al serle comunicado al general don Luis de Córdova el paso de un gran convoy por Finisterre, se hizo a la mar con la intención de cortarle el paso o capturarlo, por ello el 9 de agosto de 1780 sobre el cabo de Santa María, fue avistado y por llevar solo un navío y dos fragatas de escolta el general dio la orden de ‹caza general› siendo apresadas cincuenta y tres velas, escapando solo dos por la constante lluvia que entorpecía la visibilidad, siendo el mayor apresamiento sufrido por los británicos hasta ese momento.
A pesar de ser buques mercantes, por reunir condiciones aconsejables algunos de los apresados pasaron a formar parte de la Armada posteriormente, especialmente entre ellos los cinco fuertes y marineros indiamen los cuales una vez mejorados fueron incorporados como fragatas siendo: la Hillborough, de 30 cañones, en la Santa Balbina, de 34 cañones; la Royal George, de 28, en la Real Jorge; de 30; la Monstraut, de 28, en la Santa Bibiana, de 34, y las Geoffrey y Gatton ambas de 28, fueron respectivamente la Santa Paula, de 34 y Colón, de 30. A su vez el valor de lo capturado era de 1.600.000 libras, cifra tan alta que hizo temblar por primera vez la Bolsa de Londres por una acción de guerra.
Continúo en la misma escuadra tomando parte en el gran bloqueo de Gibraltar y por ello participó en varios combates sueltos, el 13 de septiembre de 1782 al efectuarse el ataque desafortunado de las baterías flotantes, tomó el mando del bote de su buque para acudir al rescate de las dotaciones de éstas, cuando empezaron a explosionar por efecto de las ‹balas rojas› disparadas por el enemigo, así mismo tomo parte en el posterior combate del cabo Espartel el 20 de octubre siguiente contra los británicos al mando del almirante Howe, continuando hasta ser firmada la paz de Versalles el 20 de enero, ratificada el 3 de septiembre, cuando se dio la orden de desarmar las escuadras.
Por ello se le ordenó pasar al departamento de Cartagena, donde embarcó de nuevo a mediados de 1783 en la escuadra a las órdenes del general don Antonio Barceló, zarpando el 1 de julio con rumbo a Argel, donde arribaron el siguiente 26 por encontrarse con vientos duros y contrarios, se retrasó mucho su llegada, fondearon frente a la plaza hasta que el tiempo mejoró lo que ocurrió el 1 de agosto, comenzando el primero de los nueve bombardeos de la fortaleza, al dar por concluido el castigo se dio la orden de regresar, fondeando en Cartagena sin los contratiempos de la ida unos días más tarde. Por su buen comportamiento y recomendación de su general fue ascendido a teniente de fragata.
Después de la invernada se preparó el segundo ataque sobre la misma ciudad al mando la escuadra del mismo general, dando la vela el 28 de junio presentándose frente a Argel el 10 de julio seguido, comenzando el bombardeo de la plaza, efectuándose otros siete hasta el 23 siguiente, en que el general dio la orden de regresar a Cartagena.
Sabemos que continuó embarcado en diferentes buques, participando en diferentes campañas navales hasta 1794, pues siguió ascendiendo y en 1802 ostentaba el grado de capitán de navío.
Nos lo encontramos en 1805 en la escuadra del general don Federico Gravina, al mando de la fragata Magdalena, formando parte la expedición contra la Martinica, siendo de los que atacó el fuerte del Diamante en poder de los británicos, recuperándolo para Francia, después de pasar por la Habana y embarcar correo regresó a Santander, donde quedó desembarcado.
Aquí se encontraba al producirse el alzamiento nacional del 2 de mayo de 1808 contra el invasor napoleónico, al estar sin buques la Armada pidió incorporarse al Ejército lo que le fue concedido, en sus filas combatió alcanzando el grado de teniente general, al quedar liberada la ciudad de Valencia el 3 de julio de 1813 fue nombrado su capitán general, falleciendo en su puesto a finales del mismo año.
Bibliografía:
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Paula Pavía, Francisco de.: Galería Biográfica de los Generales de Marina. Imprenta J. López. Madrid, 1873.
Priego López, Juan.: Guerra de la Independencia 1808-1814. Tomo I á VI. Servicio Histórico Militar. Editorial San Martín. Madrid. Obra que se comenzó a publicar en 1972 y se terminó en 2007, en cuyo espacio de tiempo falleció el autor que la comenzó, que era Coronel de Estado Mayor y la terminó su hijo, también Coronel de Estado Mayor don José Priego Fernández del Campo. Tomo VII á IX.
Terrón Ponce. José L.: El Gran Ataque a Gibraltar de 1782 (Análisis militar, político y diplomático). Ministerio de Defensa. Madrid, 2000. Premio Ejército 1999.
Toreno, Conde.: Guerra de la Independencia. El 2 de mayo de 1808. Círculo de Amigos de la Historia. Editions Ferni. Genève, 1974.
Toreno, Conde. Aumentada por Martínez Valdueza, J. M.: Historia del Levantamiento, Guerra y Revolución de España (1807-1814) Editorial Akrón. Astorga. León, 2009.
Válgoma y Finestrat, Dalmiro de la. Barón de Válgoma.: Real Compañía de Guardia Marinas y Colegio Naval. Catálogo de pruebas de Caballeros aspirantes. Instituto Histórico de Marina. Madrid, 1944 a 1956. 7 Tomos.
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