Casteilnou o Castilnovo, Gilberto de Biografia

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Biografía de don Gilberto de Casteilnou o Castilnovo

XVII Almirante del Reino de Castilla.

Fue el primero que ocupó el cargo en solitario para mejor organizar las fuerzas navales.

Vizconde de Casteilnou de origen genovés.

Este almirante que en principio se habla de él como perteneciente al Reino de Aragón, no aparece como a tal en ninguna fuente. Lo que nos lleva a pensar, que por los diversos frentes abiertos por el Rey de Aragón don Jaime II, lo contratara para cumplir su palabra dada al Rey de Castilla de apoyar con unidades navales, la toma de la población de Algeciras y posteriormente ayudar a los benimerines a reconquistar la ciudad de Ceuta, por ser estos aliados del Rey de Aragón.

Lo que si queda claro, es que su aparición en el sitio de Algeciras donde ya se encontraba la escuadra Castilla fue muy oportuna, tanto que consiguió darle la vuelta al resultado, pues viendo el riesgo de los castellanos arremetió con toda su fuerza en los puntos más débiles de los enemigos, teniendo lugar este hecho a finales del mes de julio del año de 1309, como lo muestra una carta fechada el día 12 de septiembre del mismo año, escrita por don Alonso Pérez de Guzmán dirigida al Rey de Aragón que dice: «. . .e sennor, sabet que si las vuestras galeras non llegaran aqui el dia que llegaron que era desfecha la movida de sobre Algeciras »

De aquí zarpa con rumbo a Ceuta, efectuando el desembarco de sus tropas reconquistando la plaza y haciendo entrega de ella al Sultán Aborrabe (así esta escrito y era conocido por castellanos y aragoneses, lo que no quiere decir que sea correcto en su idioma) Al parecer su nombre correcto es Abul Rabí Sulayman de los mariní.

A partir de aquí queda unido don Gilberto a la escuadra de Castilla, ya que el Rey don Fernando IV quiere aprovechar el dominio del mar para proseguir la reconquista, esto le lleva a disponer sus fuerzas sobre la plaza de Gibraltar, siempre contando con el apoyo de la escuadra aragonesa.

Ya que los dos monarcas, don Fernando IV y don Jaime II habían concertado atacar al mismo tiempo al reino musulmán de Granada, se repartieron la reconquista de Gibraltar por las fuerzas de Castilla, con una escuadra compuesta de diez galeras y tres leños, mientras que Aragón lo haría sobre la ciudad de Almería, con su escuadra de diez galeras y cinco leños, pensando que así los envolvían por dos frentes distintos y distantes, lo que a buen seguro haría la conquista más fácil obligando a la dispersión de las musulmanas.

Debían de unirse las dos escuadras en la isla de Ibiza para dirigirse a atacar los dos puntos, pero dada la falta de hombres en la escuadra de Castilla se vio obligada a dirigirse a Valencia, donde terminó de dotar bien sus buques, mientras que don Diego García de Toledo puso rumbo a Barcelona con la escuadra de Aragón.

Es de suponer que la demostración de oportunidad de don Gilberto, decidió al rey Fernando IV a jugar una buena baza, por ello le pidió aceptará el cargo-grado de Almirante de todas sus naves, que junto a las suyas serían una fuerza determinante para la reconquista del Peñón, por lo que le hizo la invitación para ser designado, pero como estaba contratado por el Rey de Aragón, en principio se negó a aceptar hasta que don Jaime II no le diera el permiso correspondiente.

Comunicado a don Jaime II la invitación, éste la juzgó muy oportuna y merecida, así se lo decía por carta al rey don Fernando IV, de esta forma pasó don Gilberto a las órdenes del Rey de Castilla y como a tal Almirante general del Reino, siendo confirmado a finales del año de 1309.

Concentradas las fuerzas, se pusieron a rumbo las escuadras de galeras de Castilla y Aragón, así como las naves redondas de Cantabria, que transportaban la mayor cantidad de los efectivos a desembarcar, como ellas no podían acercase a la costa, se abarloaban a las galeras y a través de estas desembarcaron, teniendo un buen fin la reconquista del Peñón, aunque no se pudo evitar un duro y sangriento combate, a pesar que para la época solo duró unos días, pues en la naves cántabras y desde tierra, se utilizaron máquinas de guerra que lanzaban grandes dardos.

Al ser tomada la plaza de Gibraltar, acudió el Rey a visitarla en cuyo instante estaban saliendo los mil ciento veinte moros cautivos, entre ellos uno muy anciano, que se paró delante de S. M. y le dijo:

« Señor que oviste conmigo de me echar de aquí, ca tu visabuelo el Rey Fernando quando tomó á Sevilla, me echó dende, é vinime á morar á Xerez, y despues el Rey Don Alonso tu abuelo quando ganó á Xerez, echóme dende, é yo vine á morar á Tarifa, y cuidando que estaba en lugar salvo, vino el Rey Don Sancho tu padre, y echóme dende, y vine á morar aquí á Gibraltar, y teniendo que en ningun lugar no estaba tan en salvo en toda la tierra de los Moros aquen de la mar coma aquí »

Con este ataque se llegaba casi al final de una etapa, ya que Ceuta quedaba en manos de un Sultán enemigo del de Granada Muhammad III, y a esta orilla, Algeciras y Gibraltar en manos cristianas, lo que ya impedía un nuevo asalto sin previo aviso del Sultán de Ceuta.

Como agradecimiento del rey de Castilla, nombró a don Gilberto « Teniente » de Tarifa, pero al parecer solo permaneció un corto tiempo, ya que en el mes de abril del año de 1312 entregó su nombramiento de Almirante y abandonó las aguas de Castilla.

Todo parece indicar, que la causa (una vez más en la historia) la provocó el impago de las mensualidades contratadas y que de no ser cobradas hacían insostenible poder mantener la escuadra.

Lo que confirma está posibilidad, es una carta fechada en el mes de julio del año de 1319, remitida por el Rey de Aragón al de Castilla, en la que le demanda los doscientos mil maravedíes que adeudaba a don Gilberto.

Seguramente al dejar de prestar sus servicios a los reyes de la Península, debió de regresar a su tierra, por lo que se le pierde la pista desconociéndose cuando y donde falleció.

Bibliografía:

Enciclopedia General del Mar. Garriga. 1968. Compilada por el contralmirante don Carlos Martínez-Valverde y Martínez.

Enciclopedia Universal Ilustrada. Espasa. Tomo 12. 1911, página 271.

Fernández Duro, Cesáreo.: La Marina de Castilla. Desde su Origen y Pugna con la de Inglaterra, hasta la Refundición en la Armada Española. Madrid. 1894.

Laurencín, Marqués de.: Los Almirantes de Aragón. Datos para su cronología. Establecimiento Tipográfico de Fortanet. Madrid, 1919.

Salas y González, Francisco Javier.: Marina Española de la Edad Media. Imprenta Ministerio de Marina. Tomo I, 1925, 2ª Edición. Tomo II, 1927. Edición póstuma.

Zurita, Jerónimo.: Anales de la Corona de Aragón. C. S. I. C. Institución “Fernando el Católico” Zaragoza 1967. Facsímil de la Edición Príncipe de 1562 y la mejorada de 1585.

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