Mayor Fernandez de Camara y Pita, Maria Biografia
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Mayor de la Cámara y Pita
María Pita.
Orígenes
Sus padres fueron Simón y María, contrayendo matrimonio en 1554 y propietarios de una tienda en el barrio de La Pescadería. Viniendo al mundo en 1556 en el mismo lugar.
Su vida y hechos
Con veinticinco años se casa con su primer marido, un carnicero llamado Juan Alonso de Rois, teniendo una hija, María. En 1585 enviuda y dos años después contrae nuevas nupcias con Gregorio Rocamunde con la misma profesión que el anterior.
El 13 de abril de 1589 zarpaba de Inglaterra una escuadra formada por ciento cincuenta velas con dos mil quinientos marineros; dieciséis mil soldados y mil doscientos nobles, embarcándose éstos por si había algo para cada uno, o sea de los que buscaban fortuna (luego hablan de los españoles), al mando de Francis Drake, con sus segundos, el duque de Essex, Roger Williams, Felipe Butler y Eduard Wingfield y el efectivo militar a las órdenes del coronel John Norreys, con la intención de apresar las flotas provenientes de tierras americanas y como segunda opción, dar apoyo al Prior de Crato y pasar al ataque a las islas Terceras. Según fuentes, se añadieron a la búsqueda del oro español también los bátavos con veinticinco buques. Su sana intención no era otra que destruir la escuadra que se estaba formando en Coruña para regresar al Canal.
El puerto y ciudad estaba protegido por mil quinientos hombres del ejército. Y fondeados, el galeón San José de Bertendona, la nao San Bartolomé, dos galeras del Jefe Pantoja y en carena dado a la banda el galeón San Bernardo, con su artillería en tierra.
Arribaron al puerto los ingleses el 4 de mayo pasado el medio día, siendo bombardeados desde el castillo de San Antón, sucediendo esto estaban embarcando en sus lanchas las tropas del ejército, poniendo rumbo a Betanzos y Santiago, pero tuvieron que enfrentarse a unidades sueltas españolas, estas les causaron algún daño. Así fueron sufriendo pérdidas en los días sucesivos, llegaron el 6 al monasterio de Santo Domingo, el cual estaba fuera de la muralla, aprovechándolo para montar en él su artillería, una vez realizado Drake envió a don Juan de Padilla marqués de Cerralbo gobernador de la plaza un emisario con un papel diciendo: «Los Generales pedían la ciudad para la reina de Inglaterra, y que entregándosela usarían de clemencia, no mirando á la afrenta que el año pasado le había querido hacer nuestra armada; que no lo haciendo se usaría el rigor de la guerra, y que, aunque estuviese dentro todo el poder de España, la habían de tomar dentro de dos días.» (Después hablan de las baladronadas de los españoles) el marqués le respondió: «Hicieran lo que debían de hacer.»
En el primer ataque fueron parados por la artillería (mal comienzo), viendo no era posible acallarla, a pesar de ser una parte muy pequeña de toda España, decidieron cavar un túnel para colocar una mina explosionando el 12, el destrozo no fue muy importante, así que prosiguieron y el 14 otra, ésta si causo más daño, a pesar de ellos fueron rechazados, se lo pensaron y el 16 volvieron a intentarlo, solo que ahora ya eran muchos menos, lanzándose entrompa unos seis mil por el hueco derrumbado de muralla, por parte española los defensores también habían mermado, siendo ahora la mitad de los iníciales.
En este ataque cayó muerto su marido Gregorio Rocamunde. Aquí es cuando nace la ayuda de las mujeres en primera línea encabezada por Mayor de la Cámara y Pita, quien recogió del suelo la espada y rodela de un soldado, subiéndose a continuación a uno de los torreones donde un alférez inglés estaba intentando enarbolar su bandera, le dio muerte, girándose al interior gritando «Quien tenga honra, que me siga.» esto se convirtió en un grito de guerra movilizando a todas las demás, quienes recogiendo las armas de los caídos comenzando a abrir fuego, logrando con su inesperada reacción obligar a retroceder a los ingleses, pues con esta reacción decayó el ánimo al ver su bandera en poder del enemigo. Y era una mujer, alguien se debió acordar de la misiva inicial y tragársela.
El fallecido era su segundo marido, pero estuvo casada cuatro veces al morir el último, el Rey don Felipe II por no tener medios de supervivencia, ordenó se le diera como pensión el sueldo de un alférez para ella y sus descendientes, añadiéndole por su demostrado valor cinco escudos a parte del sueldo mensual y una Real cédula para vender mulas a Portugal. Así nació la heroína más conocida por María Pita.
El 18 los enemigos comenzaron a embarcar desapareciendo de la vista de la ciudad el siguiente 19. Pasado el año de tocas se casó en 1590 con el capitán don Alonso de Arratia, nacido en Cádiz quien al mando de su buque realizaba comercio entre su ciudad natal y Ferrol, viniendo al mundo su tercera hija, Francisca, en uno de sus viajes fallecio. Pero aún joven pasado el año vuelve a casarse con don Gil de Figueroa, escudero de la Real Audiencia de Galicia, de este matrimonio viene al mundo dos niños Juan y Francisco.
Mientras no dejo de pleitear con el Gobierno para serle reconocidos sus servicios a España, para hacer valer estos no duda en acudir a la Corte en 1596 y 1606, consiguiendo al fin unos terrenos en Cambre (muy cerca de Coruña), donde se retiró los últimos años de su vida, falleciendo en este lugar en 1643, cuando contaba con ochenta y siete años de edad, algo casi insólito para la época, no diciendo poco de su carácter y fuerza tanto exterior como interior, indudablemente fue una mujer de «armas tomar» Se desconoce donde reposan sus restos, nada anormal por los años y aconteceres de la historia.
Bibliografía:
Díaz-Plaja, Fernando.: La Historia de España en sus Documentos. De Felipe II al Desastre de 1898. Plaza y Janes. Barcelona, 1971.
Enciclopedia Universal Ilustrada. Espasa Tomo 45. Madrid, 1964. Página 94.
Fernández Duro, Cesáreo.: La Armada Española desde la unión de los reinos de Castilla y Aragón. Est. Tipográfico «Sucesores de Rivadeneyra» 9 tomos. Madrid, 1895-1903.
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