Sicilia en sus aguas 1675
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Sicilia en sus aguas 1675
En 1675 siendo capitán de Caballos Corazas, don Pedro Fernández de Navarrete se le ordenó embarcar en la armada, pasando de nuevo al mando del príncipe de Montesarchio, con ella estaba cruzando sobre las costas de la isla de Sicilia, estando en ello, sobrevino un fuerte temporal, en el se impuso su serenidad y acierto en todas sus disposiciones, lógicamente no pasaron desapercibidas y pasó a ser muy distinguido por ello, pues no fue cosa de un instante, ya que solo se salvó su buque, yéndose a pique el resto siendo siete.
Al pasar el temporal viendo el estado del buque dos naves francesas lo atacaron, con la intención de apresarlo, pero se puso al frente de la artillería y fue tal el fuego realizado contra los enemigos, quienes fueron obligados por los certeros disparos a retirarse y no muy bien parados.
Estando de nuevo embarcado al mando de la batería de estribor del alcázar del buque, mantuvo un duro combate contra fuerzas navales francesas en el golfo de Catania, fue de tal velocidad y certero el fuego de su batería, que los franceses la abandonaron para buscar mejor lugar donde poder hacer algo, por ello y de nuevo fue felicitado por el mando.
Bibliografía:
Paula Pavía, Francisco de.: Galería Biográfica de los Generales de Marina. Imprenta J. López. Madrid, 1873.
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