Lealtad (1825)
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Construcción:
Construida en el Ferrol. Llamada San Fernando. Su gemela era la Iberia.
Su quilla se colocó el 16 de marzo de 1823. Sus obras se interrumpieron varias veces, botándose el 19 de marzo de 1825. Diseñada por don Fernando Casado de Torres.
Medía 175 pies de eslora, 152,9 de quilla, 46 de manga, 21,4 de plan, 24,4 de puntal y calado máximo de 16,6 pies. Arqueaba 872 toneladas y desplazaba 1.762 toneladas.
Armada con 50 cañones, 30 de a 24 en la batería principal, 10 de a 12 en el alcázar y toldilla y 10 carronadas de a 24 libras.
Historial:
Llegó a la Habana en diciembre de 1825. En 1826 se encontraba entre las unidades navales del apostadero de la Habana, siendo el buque insignia del brigadier don Ángel Laborde, comandante del apostadero, junto a las fragatas Iberia, Perla, Santa Sabina y Santa Casilda, la corbeta Aretusa, los bergantines Hércules y Marte y el bergantín-goleta Belona.
Con estas poderosas fuerzas, el brigadier Laborde toma la ofensiva en el Caribe, zarpando en enero de 1826 con las cinco fragatas, quedando la corbeta Aretusa en la Habana. Llegan a Puerto Rico el 12 de marzo, y el 24 de marzo entran en Santiago de Cuba las cinco fragatas, siendo la Lealtad el buque insignia de Laborde.
A esta división se le une el navío Guerrero, la corbeta Zafiro y el bergantín mercante El Bello Indio, que llegan desde la península con armas y pertrechos. La división de Laborde regresa a la Habana el 27 de junio.
El 28 de agosto de 1826 zarpa de la Habana con el navío Guerrero, las fragatas Iberia, Sabina, Casilda, Perla y el bergantín Habanero. En el mes de septiembre entró la escuadra en Puerto Rico a causa de un temporal. Regresa a la Habana en el mes de octubre. Con la escuadra maltrecha, aprovechó el comodoro Porter, al servicio de los mejicanos, para atacar la costa norte de Cuba.
La fragata Lealtad fue reparada junto a otras unidades, con las que los españoles persiguieron a Porter. De regreso en la Habana, volvió a zarpar con la fragata Iberia y el bergantín Amalia, con los que patrulló el Caribe. El 28 de febrero de 1828 apresa frente a la Habana al bergantín mejicano Guerrero, de 22 cañones. La fragata española estaba al mando del capitán de fragata don Ignacio Chacón.
El 5 de julio de 1829 zarpa de la Habana con la división al mando del brigadier Laborde, compuesta por el navío Soberano, las fragatas Santa Casilda y Restauración, tres bergantines y otros buques de guerra menores y mercantes, para realizar un desembarco en cabo Rojo, Méjico, operación que es suspendida por el mal estado de la mar. La escuadra y convoy regresa a la Habana el 22 de agosto.
Naufragada en un temporal en la bahía de Santander el 13 de enero de 1834, durante la guerra carlista. Había salido de Santander el 3 de enero rumbo a Ferrol al mando del brigadier don José Morales de los Ríos. El 10 de enero llegó de arribada a Santander a causa de los temporales, quedando fondeada al ancla en la playa del Sardinero para soportar el temporal. Al amanecer del 12 de enero se intentó tomar el puerto de Santander, pero no lo consiguieron.
Bibliografía:
Bordejé y Morencos, Fernando de.: Crónica de la Marina española en el siglo XIX, 1800-1868. Tomo I. Ministerio de Defensa. Madrid, 1999.
Egea López, Antonio.: “Ángel Laborde, comandante del apostadero de La Habana”. Revista de Historia Naval. Año 1990, nº 28.
Fernández Duro, Cesáreo.: La Armada Española, desde la unión de los reinos de Castilla y Aragón. Tomo IX. Museo Naval. Madrid, 1973.
Fernández Duro, Cesáreo.: Naufragios de la Armada española. Madrid, 1867.
Marliani, Manuel.: Combate de Trafalgar. Vindicación de la Armada española contra las aserciones vertidas por Mr. Thiers en su Historia del Consulado y el Imperio. Imprenta y Librería de Matute. Madrid, 1856.
Rodríguez González, Agustín Ramón, Coello Lillo, José Luis.: La fragata en la Armada española. 500 años de historia. IZAR. Construcciones Navales. S.A., 2003.
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