C-4 (1929)
De Todoavante.es
Construcción:
Los submarinos de la clase “C” fueron construidos en astilleros españoles, en Cartagena, por la SECN. Nacidos de la Ley Miranda de 1915, que proyectaba la creación de una fuerza submarina de 28 unidades. La ampliación de los plazos y las asignaciones presupuestarias dadas por una nueva ley el 11 de enero de 1922, permitió que se pudieran construir estos seis nuevos submarinos.
Los submarinos de la clase “C” pertenecían al tipo Holland norteamericano, y fueron un desarrollo mejorado de la clase “B”, en velocidad, autonomía, rapidez y cota de inmersión y armamento.
Desplazaban 915 toneladas en superficie y 1.150 en inmersión. Medía 75,3 metros eslora, 5,6 de manga, 5,64 de puntal, 5,80 de calado medio. La dotación era de 40 hombres.
Propulsados por dos motores diésel de 1.000 caballos y dos eléctricos de 375 caballos cada uno, propulsaban a las dos hélices una velocidad máxima en superficie de 16,5 nudos y 8,5 en inmersión. Su autonomía era de 6.800 millas a 10 nudos y 3.200 a 16 nudos en superficie, y 150 millas a 4,5 nudos en inmersión. Tenía una cota máxima de 80 metros de profundidad.
Estaba armado con un cañón Bonifaz de 75 mm, un antiaéreo desmontable y 6 tubos lanzatorpedos, cuatro a proa y dos a popa, con torpedos de 533 mm Whitehead. Podían llevar otros cuatro torpedos de reserva.
Historial:
Se colocó su quilla el 5 de mayo de 1924. Fue botado el 6 de julio de 1929 y entró en servicio en la Armada el 21 de septiembre de 1929. Se incorporó a la escuadrilla de submarinos de Cartagena y se puso al mando del capitán de corbeta don Manuel Pasquín de Flórez.
Los submarinos C-1, C-2, C-3 y C-4 tomaron parte en las maniobras de la escuadra en el Mediterráneo en los meses de septiembre y octubre de 1929.
A mediados de agosto de 1930 llegaron a Ferrol, procedentes de Cartagena, los seis submarinos de la clase “C”, donde participarán en las siguientes maniobras, que se desarrollaron en el Cantábrico en los meses de septiembre y octubre de 1930.
El 4 de septiembre de 1931 se puso al mando del capitán de corbeta don José Luis de Ribera Egea. Fue sustituido a mediados de septiembre de 1932 por el del mismo empleo don Fernando Bustillo Delgado.
En aguas de Tarragona realizaron maniobras de conjunto los submarinos A-1 Monturiol, B-5, C-1 Isaac Peral, C-3, C-4 y C-5. Procedentes de Vinaroz, entraron en Castellón el 29 de septiembre, prosiguiendo el viaje de instrucción hasta finales de octubre de 1933. El comandante de la flotilla, don García Ramírez se encontraba a bordo del A-1 Monturiol.
En los meses de mayo y junio de 1934 se realizaron unas maniobras en la escuadra en las que participaron los seis submarinos de la misma clase “C”.
En el verano de 1935 realizaron los seis submarinos un viaje de instrucción en los que visitaron varios puertos españoles y extranjeros. Salieron de Cartagena el 29 de julio al mando del capitán de fragata don Guillermo Guimerá Bosch, mandado el C-4 por el capitán de corbeta don Ramón de Aubarede. La escuadrilla llegó a Melilla el 31 de julio, permaneciendo en el puerto hasta el 3 de agosto, que zarparon rumbo a Cádiz, llegando el día 5 de agosto. Siguiente el viaje, salieron de Cádiz el 7 de agosto y llegaron al puerto británico de Plymouth a mediados del mes. Tras un crucero por el Atlántico, en el que recalaron en Brest, regresaron a Ferrol para después poner rumbo a las islas Canarias. Recalaron en Dakar, Villa Cisneros, Las Palmas y Larache. Finalizaron el crucero en Cartagena en el mes de septiembre.
En la primera quincena del mes de mayo de 1936 realizó la escuadra, al mando del vicealmirante don Francisco Javier Salas, unas maniobras en las islas Canarias. Tomaron parte varios submarinos, entre ellos el C-4. Finalizadas las maniobras, regresó a Cartagena.
En julio de 1936, cuando comenzó la guerra civil se encontraba en la división de Cartagena, mandado por el capitán de corbeta don Ramón de Aubarede Leal desde mediados de septiembre de 1934.
El 18 de julio de 1936 salió de Cartagena con los submarinos C-1 Isaac Peral, C-3 y C-6. Posteriormente se unió el submarino B-6 a la flotilla, mandada por el capitán de fragata don Francisco Guimerá. Se estacionaron escalonadamente en la costa andaluza para interceptar a los buques que intentaran trasladar tropas y armas a la península. La flotilla entró en Málaga el 20 de julio.
Tras el arresto de la mayoría de oficiales por ser afectos a la sublevación, el mando del C-4 se concede al teniente de navío don Jesús Lasheras Mercadal, anterior segundo comandante del submarino C-1 Isaac Peral. El capitán de corbeta Ramón de Aubarede Leal fue encarcelado en el buque prisión Monte Toro y después ejecutado.
Su primera acción militar en la guerra civil se produce la noche del 26 al 27 de julio cuando dispara 37 cañonazos y lanza un torpedo contra dos mercantes que cruzan el estrecho, sin hacer blanco. Frente a Huelva recibe un impacto de la artillería terrestre y se dirige a Tánger.
Una vez reparado, sale de Cartagena el 22 de agosto con el submarino C-5, entrando en Málaga al día siguiente. Reunidos con el submarino C-3, salen de Málaga el 25 de agosto rumbo al Cantábrico. Llegaron a Bilbao el 29 de agosto, desembarcando gran cantidad de armas y municiones. El 2 de octubre iniciaron su regreso al Mediterráneo, llegando a Málaga el día 8 los submarinos C-3 y C-4, siguiendo hasta Cartagena el C-6.
Hasta finales del año 1936 estuvo patrullando las aguas del mar de Alborán con base en Málaga. Comenzado el año 1937 empezó a operar desde Valencia. El 30 de marzo de 1937 zarpa de Cartagena con el C-1 Isaac Peral para interceptar a los buques que llegaban de Italia, regresando a puerto a primeros de abril sin resultados.
El 13 de abril salen de Cartagena los submarinos C-1 Isaac Peral y C-4 con órdenes de dirigirse al Cantábrico. A causa de una avería a la altura del estrecho de Gibraltar en los motores diésel del C-1 Isaac Peral, los dos submarinos regresan a Cartagena.
A finales de abril sale rumbo al Cantábrico y llega a Bilbao en el mes de mayo. Allí se encuentra con el submarino C-6, salido unos días antes de Cartagena. Al caer Bilbao, los buques se trasladan a Santander y después a Musel, Gijón.
El 21 de junio de 1937 avista el C-4 al crucero Almirante Cervera. Atacado con cargas de profundidad, el submarino no ataca, regresando a Santander. Ante la inminente caída de Santander, algunos oficiales y políticos abandonan el puerto el 25 de julio a bordo del submarino. Ese mismo día llega a Gijón, donde se reúne con los submarinos C-2 y C-6.
Tras el bombardeo del puerto de Musel el 28 de agosto, los buques salen a la mar y el C-4 entra en el francés de Le Verdon-Sur-Mer al día siguiente. El teniente de navío Lasheras se puso de acuerdo con el comandante del C-2, el alférez Ferrando y que se encontraba en Brest, para hacerse con los submarinos en colaboración con agentes franquistas. Tras el fracaso, el capitán de corbeta don Pedro Prado se hace cargo de los dos submarinos.
El 18 de diciembre de 1937 se puso al mando del oficial soviético Ivan Alekseevich Burmistrov. El C-4 permanecería en obras hasta mediados de abril de 1938, saliendo el 14 de abril del puerto francés de Burdeos para dirigirse a Cartagena al mando del oficial soviético Burmistrov. Llega a la base el 23 de abril.
El 19 de junio, al mando de otro oficial soviético, Guermen Yu Kuzmin, sale de Cartagena para incorporarse a su nueva base, llegando a Barcelona el 21 de junio. Realizó varias patrullas en las costas catalanas. El 15 de julio de 1938 se trasladó a Mahón, regresando a Barcelona el día 21. Zarpa de nuevo el día 26 para escoltar a un mercante hasta el puerto. El 12 de agosto sale de nuevo rumbo a Mahón para llevar correspondencia. De regreso en Barcelona el 18 de agosto, parte de nuevo rumbo a Cartagena, llegando el día 20 de agosto.
El 23 de agosto salió de Cartagena con el submarino C-2. Patrullaron las aguas cercanas al puerto. El 12 de septiembre entró en el dique, permaneciendo en obras hasta finales de año. Salió para hacer pruebas el 23 de diciembre, quedando varado. A causa de varias quejas sobre la incompetencia del oficial soviético, el 27 de diciembre se da su mando al alférez de navío don Sebastián Gallo.
A causa de nuevas averías, entró de nuevo en el arsenal, saliendo a navegar el 9 de enero de 1939. Al día siguiente se le da su mando al teniente de navío don Eugenio Calderón Martínez, con el que realiza una patrulla entre Barcelona y Cabo Tortosa, regresando a Cartagena el 14 de enero. Hasta el final de la guerra realizó muy pocas salidas y de corta duración.
La mañana del 5 de marzo salió de Cartagena con la escuadra republicana, internándose en Bizerta el día 7. A primeros del mes de abril se hizo cargo de su mando el teniente de navío don Juan García. Con la nueva tripulación, sale con la escuadra el 2 de abril y llega a Cádiz el día 5.
Incorporado a la Armada vencedora en la guerra, el 3 de octubre de 1939 se pone al mando del capitán de corbeta don Joaquín Cervera y Cervera, sustituido el 28 de julio de 1942 por el del mismo empleo don Manuel Castañeda Barca, mando que tuvo durante casi cuatro años.
El 30 de abril de 1946 se realizó un homenaje a los fallecidos en el Castillo Olite frente a la isla de Escombreras, en Cartagena. El general Franco presenció los actos a bordo del submarino C-4. Unos días antes, el 20 de abril, se puso al mando del capitán de corbeta don Francisco Reina Carvajal.
El 27 de junio de 1946 fue hundido en un trágico accidente al ser abordado por el destructor Lepanto. Los tres submarinos, C-2, C-4 y General Sanjurjo, realizaban maniobras en aguas de Soller, islas Baleares, con los destructores Alcalá Galiano, Churruca y Lepanto. Cerca de las dos de la tarde, el C-4 emergió a pocos metros de la amura de babor del destructor Lepanto, último de la fila. Sin poder reaccionar, el destructor abordó al sumergible y casi lo partió en dos, desapareciendo de la superficie casi inmediatamente, arrastrando a sus 44 hombres de dotación al fondo de la mar.
Bibliografía:
Aguilera, Alfredo y Elías, Vicente.: Buques de guerra españoles, 1885-1971. Editorial San Martín. Madrid, 1980.
Cervera Pery, José.: La guerra naval española (1936-39). Editorial San Martín. Madrid, 1988.
Diarios ABC, La Vanguardia.
González, Marcelino.: 50 Barcos españoles. Fundación Alvargonzález. Gijón, 2009.
González, Marcelino.: Otros 50 barcos españoles. Fundación Alvargonzález. Gijón, 2012.
Todoavante ©