Cañoneros del fin del Mundo, Los10

De Todoavante.es

Saltar a navegación, buscar

(Publicado por el periódico La Esperanza el miércoles 22 de mayo de 1872, con el título Islas Filipinas) Con esta última noticia doy por finalizada la primera parte de la historia de los 18 cañoneros de Filipinas. Me falta solamente por perfilar las conclusiones finales de todo lo que hasta el momento hemos publicado (a ver si es posible tenerlas a primeros de semana) Como digo, solo se trata de la primera parte, mi intención es seguir hasta el año del desastre, 1898, y tratar de averiguar lo que hay de cierto en la “historia” de las tres series de cañoneros, al mismo tiempo que damos a conocer la vida operativa de los buques. Lo cierto es que estos “pequeñajos” se comportaron como auténticos “gigantes”. El partido que nuestros marinos sacaron a estos pequeños cañoneros fue enorme, y a uno, romántico por naturaleza, y enamorado de esas “viejas cafeteras”, le hacen sentirse muy orgulloso de nuestra Armada y de su historia. Con los tiempos que corren, sobre todo aquí, en esta parte de España llamada Cataluña, el “enfrascarse” en esta apasionante historia, es toda una liberación. Lo dicho, a ver si la próxima semana tengo las conclusiones a punto. Antes de comenzar con las conclusiones o, repaso de todo lo que hemos publicado, un par de apuntes: Buscando datos de nuestros cañoneros encontré, a propósito de la insurrección en Cavite, un trabajo publicado por la Revista de Historia Naval (2010, núm.108) y titulado La Actuación de la Marina en la Algarada de Cavite de Enero de 1872, escrito por D. Manuel Rolandi Sánchez-Solís (Geólogo. Investigador Naval). Del artículo extraigo los siguientes párrafos:

Entre las consideradas como unidades mayores se contaba, en enero de 1872, con tan sólo un buque de los catalogados como de 1.ª clase en el Estado General de Buques de la Armada de 1870: la fragata de hélice Berenguela, buque insignia del contralmirante jefe del apostadero de Filipinas, de 2.600 toneladas de desplazamiento, máquina de 360c.v. nominales que le proporcionaban una velocidad de 8 nudos, y un armamento de 20 cañones lisos de 20 cm en batería central, y 6 rayados de 16 cm; así como con ocho unidades consideradas de 2.ª y 3.ª clase, constituidas por las modernas corbetas de hélice Santa Lucía, Vencedora y Wad Ras, con desplazamientos próximos a las 750 toneladas, máquina de 160 c.v. nominales que le proporcionaban una velocidad de 8 nudos, y un armamento de 2 cañones lisos de 20 cm en colisa en el centro del buque y 1 liso en colisa a proa y las goletas de hélice —en su mayoría, con casco de hierro—; Circe, Valiente, Constancia, Animosa y Santa Filomena de 510 toneladas de desplazamiento y máquinas de 100 c.v. nominales, que le proporcionaban una velocidad de 8 nudos, y un armamento de 2 cañones rayados de 16 cm y 1 de 12 cm. En enero de 1872, estas dos últimas goletas se encontraban fuera de servicio y «subidas en varadero» para reparación de máquinas y calderas. En su conjunto, suponían una fuerza naval de 10 unidades, que montaban 33 cañones —23 lisos de 20 cm, 7 rayados de 16 cm y 3 rayados de 12 cm— y llevaban unas dotaciones próximas a los 1.180 hombres, que estaban al mando del capitán de navío Alejandro Arias Salgado Tellez, comandante de la fragata Berenguela.

Por su parte, las unidades menores y de apoyo para la defensa costera, todas ellas consideradas como buques de 3ª clase, estaban compuestas por media docena de cañoneras de hélice (Mindanao, Panay, Albay, Arayat, Manileño, Samar 2 y Bulusan 2) pertenecientes a las Fuerzas Sutiles, junto con una veintena de lanchas y falúas artilladas, para vigilancia fluvial. Las citadas cañoneras —o «cañoneros» como también se las denominaba—correspondían, en su totalidad, a una serie de unidades construidas en 1860 en Inglaterra y montadas, posteriormente, en Hong Kong, con desplazamientos variables ente 83 y 37 toneladas, máquinas de 20 a 30 c.v. nominales, que les proporcionaban una velocidad de 9 nudos, y artilladas con 1 cañón rayado de 16 ó 12 cm a proa, y, en algunos casos, con otro de 8 cm a popa. En su conjunto, suponían una fuerza de apoyo costero de 7 unidades, que montaban 12 cañones rayados —4 de 16 cm, 5 de 12 cm y 3 de 8 cm— y unas dotaciones  próximas  a  los 290 hombres, bajo el mando del capitán de navío Juan Martínez Illescas, 2.º jefe del apostadero de Filipinas.

Finalmente, y por aquellas mismas fechas, se encontraba realizando labores de investigación en el archipiélago filipino la Comisión Hidrográfica de la armada, a bordo de la corbeta de hélice vencedora, que, pocos meses después, en septiembre de 1872, sería relevada por la goleta Wad ras, y que, en sus periplos por las costas filipinas, solía ir escoltada por el cañonero Mindanao y la falúa núm. 2.

Son de reseñar dos aspectos de lo leído, el primero, el autor nos dice lo siguiente: …… una serie de unidades construidas en 1860 en Inglaterra y montadas, posteriormente, en Hong Kong. Se trata, pues, de un aval a la “tesis” de D. José Lledó y de nuestro compañero espaldar. El segundo: el autor añade el número 2 a los cañoneros Samar y Bulusán, dando a entender que se trataría de una segunda serie de ambos.

Y para finalizar recordemos algo de lo que nos decía D. José Lledó al principio del trabajo:

En 1872 desaparece también el llamado Balanguingui y es reemplazado por otro nuevo con el nombre de Callao, construido en Cavite en 1873, de 60 toneladas de desplazamiento y máquina de 24 caballos nominales de fuerza, con casco de madera y que pasa a ocupar el último lugar de la lista.

Noticia que nos da La Correspondencia de España (y de la que también se hacen eco la mayoría de los periódicos) el sábado 20 de marzo de 1875:

Los periódicos y las cartas de Manila, recientemente recibidos, dan cuenta de un vaguio que se dejo sentir en la mayor parte de las provincias del archipiélago en los primeros días de enero. Sus resultados han sido funestos, ocasionando numerosas víctimas y pérdidas de gran consideración, siendo las más notables las de la cosecha de tabaco en el N. de Luzón, y las de la caña de azúcar en la isla de Negros, una de las más adelantadas y productoras.

Entre los diversos siniestros marítimos que han tenido lugar, se cuenta la pérdida total del cañonero Balanguingui y bergantín transporte María Luisa, en la isla de Carabao, habiéndose ahogado el carpintero y dos hombres de este último, y la del cañonero Callao, que afortunadamente pudo ponerse a flote.

Sí la afirmación de D. José de que, el Balanguingui desaparece en 1872 es cierta, no cabe la menor duda que nos encontraríamos con un segundo Balanguingui.

Conclusiones.

1ª.- Que nuestros cañoneros comenzaron a tener problemas al poco de comenzar a prestar servicio es un hecho. Las noticias aparecidas en la prensa a partir del mes de abril de 1862 y la carta del capitán de fragata, D. José Malcampo, confirman este extremo.

2ª.- D. Manuel Rolandi Sánchez-Solís, en su artículo La Actuación de la Marina en la Algarada de Cavite de Enero de 1872, señala que los cañoneros fueron montados en Hong Kong, avalando de esta manera la opinión de nuestro compañero espaldar en este sentido. Yo, por mi parte sigo pensando que los buques fueron montados en Manila, y para ello me baso en tres aspectos: imposible encontrar noticia alguna que nos indique, no ya que fueran montados en Hong Kong, sino que ha sido imposible también, encontrar nada que nos informe del traslado, o de la navegación de los mismos, desde el puerto chino hasta Manila; la biografía de D. Joaquín Togores, que nos señala explícitamente que los buques …se trajeron de Inglaterra, en piezas, para ser montados en el arsenal de Cavite; las noticias de la época, entre ellas las que textualmente nos dice El 4 de abril estaban armándose en Manila otras dos cañoneras de a veinte caballos, cuya habilitación y armamento esperaban quedaría terminado en unos quince días. Yo entiendo la palabra armándose como sinónimo de montándose, y posteriormente son habilitados y armados, este último armados, en el sentido de colocarse la artillería.

3ª.- Que el Gobierno de España piensa en la sustitución de los cascos de metal de los buques, o de parte de ellos, con cascos de madera es un hecho que, también, creo irrefutable: Parece que por el ministerio de Marina se ha pensado ya en la construcción de cascos de madera que reemplazando a los de hierro, puedan utilizar las máquinas y sustituir progresivamente los barcos cañoneros construidos en Inglaterra; que el señor ministro de Marina ha pensado en la construcción de cascos de madera, que, reemplazando a los de hierro, puedan utilizar las máquinas y sustituir progresivamente los barcos ya perdidos; Se construye a toda prisa un cañonero con casco de madera, como prueba para sustituir a los de hierro.

4ª.- El cañonero Prueba, con casco de madera, es botado el 1 de marzo de 1863. Este cañonero aparece por primera vez en el Estado General de la Armada del año 1864, y sustituye con el número 5 al cañonero Luzón, que deja de aparecer en los Estados Generales.

5ª.- En junio de 1864 se anuncia que…Iban a ponerse las quillas de tres vapores cañoneros, iguales o mayores que uno llamado el cañonero Prueba, hermoso buque que acaba de ser construido en Cavite con un resultado sorprendente por su andar y demás condiciones, y más adelante …Estos cañoneros son de madera y mucho mayores que los 18 de hierro construidos en Inglaterra. Mi opinión particular es que estos tres buques serán los futuros Filipino, Manileño y Caviteño.

6ª.- El 22 de junio de 1864 se publica un Real Decreto del Ministerio de Marina, en el que se fijan las fuerzas navales para el citado año. En lo que respecta a los cañoneros de Filipinas, aparece un nuevo buque, el cañonero Filipino. Este cañonero figura en el puesto número 8, y sustituye en el mismo al cañonero Cebú, que deja de figurar en los Estados Generales. Añadir también que, en este Real Decreto desaparece de la lista el cañonero Mactán, sin que por el momento haya sido sustituido por otro buque, quedando el número de cañoneros en 17.

7ª.- En el Estado General de la Armada, publicado en enero de 1867, aparecen por primera vez los cañoneros Manileño y Caviteño. Estos buques vienen a sustituir a los cañoneros Mactán y Taal, y ocupan los puestos dejados por los mismos, esto es, el número 17 y el número 18 respectivamente. Llegados a este punto, tenemos ya cuatro nuevos cañoneros con casco de madera.

8ª.- Noviembre de 1867: También el cañonero Bojeador, del apostadero de Filipinas, se encuentra en estado de exclusión, toda vez que la carena que necesita excede en valor a los dos tercios del buque nuevo. Más en este caso es natural se proceda a construir un casco de madera para utilizar la máquina, armamento y pertrechos, como se hizo ya con los cañoneros Prueba, Filipino, Manileño y Caviteño.

9ª.- Noviembre de 1867 (publicado en diciembre): Disponiendo se excluya el casco del cañonero Mindoro y se proceda a reemplazarlo en el arsenal de Cavite, con otro de madera.

10ª.- Mayo de 1868 (publicado en junio): Dispone de excluya del servicio en el Apostadero de Filipinas el cañonero Panay, construyendo otro nuevo que lo reemplace.

11ª.- En junio de 1868 se nos informa que: cuanto que se han aumentado a aquellos presupuestos los créditos necesarios para construir en la Habana y en Filipinas buques cañoneros, tan necesarios para la vigilancia y defensa de sus costas.

12ª.- El 7 de julio de 1868 se informa que: Constrúyense en el arsenal de Cavite (Filipinas), los cascos de dos cañoneras de hélice que deben recibir máquinas de 30 y 20 caballos.

13ª.- El 12 de junio de 1868 podemos leer en La Marina Española: sin que por eso hayan dejado de aumentarse los créditos extraordinarios de los mismos apostaderos para atender la construcción de un cañonero que reemplaza en la Habana al vapor general Lezo, y de los necesarios en Filipinas para sustituir los de hierro que se van excluyendo.

14ª.- En septiembre de 1869 se informa que: En Cavite van a construirse dos cañoneras para máquinas de 20 y 30 caballos.

15ª.- En agosto de 1870 se informa que: De un día a otro serán botados al agua los dos cascos para cañoneros, cuyas obras interiores siguen con gran actividad en la playa de San Nicolás, cerca del puente del Murallón. Caerán al agua de costado, y en seguida serán remolcados a Cavite para la colocación de máquinas. Ambos cascos habían salido de muy bonitas líneas y proporciones.

El último Estado General de la Armada del que dispongo es el correspondiente al año 1870 (figura en los Apéndices del libro de D. José Lledó); en el mismo, y en lo que se refiere a nuestros cañoneros, podemos leer:

Cañoneras de hélice:

181 Mindanao.- 1; 30 cv; 1860; T.N. D. Juan Pascual de Bonanza y Soler.

182 Calamianes.- 1; 30 cv; 1860.

183 Paragua.- 1; 30 cv; 1860.

184 Mindoro.- 1; 30 cv; 1860; T.N. D. José Guerra y Macías. En estado de exclusión en noviembre de 1867, se trataría de un segundo Mindoro.

185 Prueba.- 1; 30 cv; 1860; T.N. D. Manuel de la Cámara y Livermore. Cañonero con casco de madera que sustituye al Luzón.

186 Panay.- 1; 30 cv; 1860. En estado de exclusión en mayo de 1868, se trataría de un segundo Panay.

187 Samar.- 1; 30 cv; 1860. Según D. Manuel Rolandi Sánchez-Solís se trataría de un segundo Samar.

188 Filipino.- 1; 30 cv; 1860; T.N. D. José Morgado y Pita da Veiga. Cañonero con casco de madera que sustituye al Cebú.

189 Bulusán.- 1; 20 cv; 1860. Según D. Manuel Rolandi Sánchez-Solís se trataría de un segundo Bulusán.

190 Joló.- 1; 20 cv: 1860; T.N. D. Carlos Guzmán y Galtier.

191 Mariveles.- 1; 20 cv; 1860; T.N. D. José Jiménez y Franco.

192 Arayat.- 1; 20 cv; 1860.

193 Pampanga.- 1; 20 cv; 1860; T.N. D. Juan Rapallo y Michelena.

194 Bojeador.- 1; 20 cv; 1860; T. N. D. Manuel Elisa y Vergara. En estado de exclusión en noviembre de 1867, se trataría de un segundo Bojeador.

195 Balanguingui.- 1; 20 cv; 1860. Desaparecido en 1872, y a parecido nuevamente en 1875, se trataría de un segundo Balanguingui. Aunque, en este caso, me adelanto un poco a los acontecimientos.

196 Albay.- 1; 20 cv; 1860.

197 Manileño.- 1; 20 cv; 1860; T.N. D. Luís Izquierdo y Pozo. Cañonero con casco de madera que sustituye al Mactán.

198 Caviteño.- 1; 20 cv; 1860; T.N. D. Federico Estran y Justo. Cañonero con casco de madera que sustituye al Taal.

¿Podemos afirmar que hubo dos series diferentes de cañoneros? (aparte, obviamente, de la tercera):

Por los datos aportados podríamos decir que, como mínimo, hubo una segunda serie parcial. Tenemos datos concretos de hasta 8 cañoneros nuevos, y tenemos datos que apuntarían a otros dos cañoneros nuevos, el Samar y el Bulusán. La suma de ambos nos daría 10 nuevos cañoneros.

Las diversas informaciones recogidas señalan una y otra vez la sustitución de buques con casco de metal, por otros con casco de madera. Diversas informaciones señalan, además, la construcción de cañoneros en el arsenal de Cavite.

Con toda la información aportada, ¿sería posible que los cañoneros Mindanao, Calamianes, Paragua, Joló, Mariveles, Arayat, Pampanga y Albay aguantaran más allá del año 1872?

Me ha sido imposible encontrar datos que nieguen este extremo, pero, mi opinión particular, muy particular, es que no. Creo firmemente que sí que hubo una segunda serie de cañoneros. Por lo datos aportados sería complicado entender la sustitución de solo la mitad de la primera serie. Pero, repito, es solo una opinión “muy particular”.

En todo caso, y como más arriba ya señalé, se trata de la primera parte de la historia, una historia que ha llegado hasta el año 1872, pero que finalizará en el año del desastre, en 1898.

Desde este momento, y hasta la reanudación, quedo a su entera disposición. Se admiten comentarios, críticas y demás, que sus señorías consideren convenientes.

Por cierto, tres páginas y media dedicadas a estos pequeños buques, no está nada mal. Si, como pienso, el resto del trabajo abarcará otras tres y media como mínimo, serán 7 páginas dedicadas a los mismos. Todo un logro ¡sí señor! Difícilmente podrá encontrarse fuera de nuestro Foro algo parecido.

Desde EL LAGO ESPAÑOL.

Un saludo.

Bibliografía:

Biblioteca Nacional de España. Hemeroteca Digital:

La Correspondencia de España.

La Época.

El Imparcial.

El Correo Militar.

La España.

El Clamor Público.

La Iberia.

El Mundo Militar (El Panorama Universal).

El Lloyd Español.

La Marina Española.

La Esperanza.

El Contemporáneo.

La Discusión.

Compilado por Fernando González Magán.

Todoavante ©

Volver

Principio

Herramientas personales
Espacios de nombres
Variantes
Acciones
Navegación
Hª NAVAL de ESPAÑA
Estado Mayor
Ordenes Militares
Flotas
Buques General
De 1248 a 1514
De 1515 a 1700
De 1701 a 1833
De 1834 a 1957
Herramientas